U.D.O. y su Steelfactory en Madrid

Tras su larga gira como Dirkschneider, en la que interpretó los grandes éxitos de su etapa en Accept, U.D.O. regresó a nuestro país para presentarnos su último trabajo, ‘Steelfactory’, decimosexto desde que comenzara su andadura en solitario en 1987.

Poco se puede decir de Udo Dirkschneider que no haya sido dicho ya, una leyenda del metal por méritos propios. Desde que comenzó su carrera en Accept hace ya más de cuarenta años, Udo no ha parado de trabajar sacando disco tras disco y encadenando una gira tras otra y, aunque esté ya en edad de jubilarse, todo parece indicar que tiene cuerda para rato. Acompañado de dos nuevos miembros, Tilen Hudrap al bajo y Dee Dammers a la guitarra, el quinteto nos presentó su último trabajo, ‘Steelfactory’, un disco con el sonido característico de U.D.O y que, a pesar de no ser de lo mejor de la banda, contiene un puñado de grandes temas.

Dead City Ruins, hard rock para empezar la noche

Llegados desde Australia, y con tres álbumes a sus espaldas, la banda de hard rock Dead City Ruins ha sido una de las elegidas para acompañar a U.D.O en su gira europea. Haciendo gala de un sonido muy trabajado, con grandes solos de guitarra y una base rítmica muy cuidada, los australianos vienen con la intención de hacerse un hueco en Europa.

Dead City Ruins (Foto: Dani Cruz)

A las siete menos diez, con solo media sala abierta y muy poco público, comenzaron su show los australianos. La música sonaba atronadora, pero la voz un poco baja y enlatada, pero a nadie pareció importarle ya que la joven banda era pura actitud en el escenario, melenas al viento y solos de guitarra apoteósicos fueron su tarjeta de presentación. Tras dos temas ya tenían a la audiencia ganada, coreando con ellos y cabeceando al son de la música.

Dead City Ruins (Foto: Dani Cruz)

El cantante se dirigió en varias ocasiones al público para comentar que venían desde Australia y presentar varios de sus temas, pero entre que en España no somos muy dados al inglés y el acentazo australiano del cantante, la gente no terminaba de entender bien los mensajes. La banda tuvo tiempo para tocar siete temas en una media hora, entre ellos “Dirty Water”, “The River Song”, “Bones” o “Happenzella”. Un concierto muy animado que el público supo apreciar y corresponder con una fuerte ovación.

Red Partizan, Made in Germany con sabor serbio

La segunda banda elegida para acompañar a U.D.O durante su gira europea son sus compatriotas Red Partizan, que nos presentaron su primer trabajo, ‘Rebels & Partizans’, en el que narran las andanzas del abuelo del cantante, de origen serbio, durante la Segunda Guerra Mundial, a ritmo de metal duro con toques de industrial.

Red Partizan (Foto: Dani Cruz)

Una banda que despertaba mi curiosidad, ya que apenas hay material de ellos en youtube y no había podido verlos por ningún sitio, lo cual hizo que mi sorpresa fuera mayor al ver que, además de los músicos con pintas de heavys de la vieja escuela, la banda cuenta con una joven soprano que subió al escenario vestida con traje de noche. Una sorpresa mayúscula. La voz de la chica, que a mitad de concierto se arrancó a hablar en castellano, daba el contrapunto agudo a un sonido muy pesado y a la voz de su cantante masculino, también muy grave. Una apuesta muy interesante y revolucionaria que, por la cantidad de móviles que vi en alto, creo que no fui al único al que gustaron.

Red Partizan (Foto: Dani Cruz)

Durante poco más de media hora tuvieron tiempo para poner a todo el mundo a saltar gracias a su particular estilo de metal. Tocaron entre otras “Hail To The King”, “Rebels And Partizans”, “The End” y “Dead Or Alive”. El público les dedicó un gran aplauso al final, acercándose después a la zona del merchandising para hacerse fotos con ellos y coreándolos hasta que entraron al backstage. Un gran show de una banda prácticamente desconocida.

Ingeniería alemana al servicio del metal

Tras un parón navideño, U.D.O. arrancó de nuevo la maquinaria haciendo tres visitas a nuestro país, la primera de ellas a Madrid, dando de esta manera el pistoletazo de salida a su gira europea. Un montón de metalpacos había abandonado su cueva e iban llenando poco a poco la sala. Una audiencia en la que predominaban las calvas y las canas pero que tenían muy claro lo que esperaban ver.

U.D.O. (Foto: Dani Cruz)

A las nueve menos cuarto, en un escenario donde la batería era la gran protagonista, con un montón de humo y escenografía simulando una factoría, dio comienzo el concierto con la canción “Tongue Reaper” perteneciente a su último trabajo. Un sonido perfecto desde el principio en el que la voz de Udo sonaba clara sobre el resto de instrumentos, con unos músicos bordando solos y ganando protagonismo en las partes instrumentales.

Encadenaron la siguiente canción, “Make The Move”, más lenta que la anterior, con una guitarra marcando unos riff increíbles mientras Udo cantaba el estribillo. Un gran tema que hizo que el público hiciera palmas animando a la banda. “24/7” fue la siguiente en sonar, con un Udo cantando como si apenas le costara, demostrando que no ha perdido nada de voz en todos estos años de carrera, una banda tocando genial y un público enloquecido.

U.D.O. (Foto: Dani Cruz)

La banda abandonó el escenario mientras sonaba la intro del siguiente tema, “Mastercutor”. Un temazo en el que los jóvenes músicos demostraron su complicidad entre ellos, pero siempre sin hacer sombra al protagonista del show, un Udo que generoso sabía echarse a un lado para dejarles lucirse. Con “A cry of a nation” continuó el show, un tema muy metalero en el que dispararon las pistas habladas pero no terminaron de sonar bien. Un mal menor ante semejante hit. Como temazo fue “Metal Machine” uno de los grandes himnos de Udo, recibido con vítores y disfrutado por todos los asistentes.

La siguiente canción fue “Independence Day”, anunciada como “a fucking old song”, lo cual pareció encantar a la audiencia, que no dudó en corear los estribillos con varios oooh ooh. Continuaron con “In The Heat Of The Night”, mi canción favorita de su último trabajo, muy aplaudida por el público y que sonó de escándalo. Un tema nuevo con ese sabor ochentero que todo metalero aprecia. Con “Vendetta” despertaron a los asistentes, dándoles una lección de metal clásico y volviendo a levantar brazos y cuernos en alto. Encadenado con ésta sonó la potente “Rising High”, un verdadero tiro con una batería atronadora.

Baladas y trallazos por igual

Un solo de guitarra de Dee Dammers sirvió para dar paso al siguiente tema, la balada “In The Darkness”, uno de los clásicos de la banda, encadenada con otra balada, “I Give As Good As I Get”. Una intro de bajo y batería dio paso al siguiente tema “Hungry And Angry” también perteneciente a su último trabajo. Tras esta, Udo anunció la siguiente canción, el clásico “Heart Of Gold” para continuar con “One Heart One Soul”, otro de los grandes hits de la banda y que fue la elegida para poner fin a la primera parte del concierto. Los bises arrancaron con “Holy”, una canción que poca gente esperaba en ese momento, siendo los clásicos de Accept o tal vez “Man And Machine” lo que el público esperaba escuchar. A pesar de ello la canción fue coreada y bien recibida.

U.D.O. (Foto: Dani Cruz)

Continuaron los bises con “Animal House”, una canción más cañera y adecuada para ir cerrando un concierto. La batería de “Man And Machine” retumbó en la sala, donde el público acompañó a Udo con un buen montón de oh. Y para cerrar el concierto la canción elegida fue “They Want War” otro tema con solera y que es sin duda uno de los mejores de la banda.

Y de esta manera finalizaron casi dos horas de show en las que Udo demostró estar en plena forma, no haber perdido nada de voz y, gracias a sus jovencísimos compañeros, los cuales mostraron mucha complicidad durante todo el concierto, tener cuerda para rato. Tuvieron un gesto al finalizar el concierto con el ex bajista de la banda, Fitty, el cual abandonó la formación recientemente tras 22 años en U.D.O.

U.D.O. (Foto: Dani Cruz)

Primer tour sin tocar canciones de Accept, una decisión complicada que no ha gustado a todo el mundo pero que me parece muy respetable, sobre todo para una banda con tantos años de experiencia y con tantas buenas canciones, a pesar de no tocar “Cry Soldier Cry”, canción que no paraba de pedir un zumbao del público.