Los amantes del thrash metal tenían una cita marcada en rojo en el calendario desde hace varios meses, y es que tres de los pesos pesados del género han unido fuerzas para dar forma a una gira de lo más apetecible.

Desde Bay Area, cuna de principales bandas del citado género, Testament, Exodus y Death Angel se encargarían de ofrecer una de las giras más potentes del año, bautizada como The Bay Strikes Back.

Tras tocar en la Ciudad Condal el día anterior, el power trío aterrizaba en Madrid en la noche del viernes con fin de hacer a sus fanáticos comenzar el fin de semana de la mejor manera posible.

A primera hora de la tarde, la muchedumbre ya se agolpaba en los alrededores del Palacio Vistalegre de Carabanchel, dispuestos a no perderse ni un solo minuto del espectáculo, panorama poco común cuando actúan otros teloneros de «menor calibre», es por eso que la sinergia de esta unión de bandas estaba calculada desde el primer momento.

Ángeles del mismísimo Infierno

Con rigurosa puntualidad Death Angel saltaban sobre el escenario con el propósito de caldear el ambiente. El tema escogido para romper el hielo fue “Humanicide”, corte que da nombre a su último trabajo de estudio. Al quinteto no le hizo falta demasiado para meterse al público al bolsillo, y para la interpretación de “Voracious Souls” los mosh pits ya eran imparables entre la muchedumbre.

Death Angel (Foto: Óscar Gil)

Su líder Mark Osegueda desarrolló una labor impecable, mostrando un nivel de forma vocal de lo más alto. No dudó en interactuar con sus seguidores en repetidas ocasiones, recalcando el orgullo de tocar con sus compatriotas, así como de regresar a la capital tres años después de su última visita. Las guitarras de Rob Cavestany y Ted Aguilar sonaban aplastantes junto al bajo de Damien Sisson y los enérgicos golpes de Will Carroll en canciones como “Claws In So Deep” o “The Moth”.

Death Angel (Foto: Óscar Gil)

Aunque fueron quienes contaron con menor espacio en el escenario, así como de menor tiempo de actuación, los californianos salieron a darlo todo como si de los cabeza de cartel se tratase. Factor que supo apreciar bien el público que alababa a la banda a cada minuto. Su setlist estuvo centrado básicamente en la etapa más reciente de la banda, lo que no impidió que sonasen grandes hits como  “Seemingly Endless Time” y “Thrown To The Wolves” que ponían punto final a una magnífica actuación.

Exodus y los problemas del directo

Un cuarto de hora antes de lo previsto se apagaban las luces y daba comienzo la actuación de Exodus. A modo de intro sonó de manera inesperada la pegadiza “Alcohol, Alchol, Alcohol”, el festivo tema de los Inhumanos que describía a la perfección la gran fiesta que acontecía dentro de la Black Box.

Encabezando su set nos topamos de lleno con “Body Harvest” a la que siguió el clásico “Blood In, Blood Out”. Cuando todo parecía ir como la seda, en torno al final del citado tema comenzaron a aparecer los primeros problemas: el sonido de las dos guitarras, el bajo y el micrófono se disipaba por completo, así como gran parte del volumen de la batería. Ante la sorpresa, lejos de venirse abajo, el quinteto comandado por Steve «Zetro» Souza  intentó animar al respetable antes de recomponerse para continuar con “Deliver Us To Evil”.

Exodus (Foto: Óscar Gil)

Hace tiempo que los de San Francisco no sacan nuevo material al mercado  por lo que su gran abanico de temas puede ser casi considerado como clásicos del thrash. Aunque el entusiasmo de los asistentes, más que por los temas, vino dado por su reencuentro con Gary Holt, guitarrista original de la banda, y quien por centrar su atención en Slayer se encontraba bastante ausente de Exodus.

Exodus (Foto: Óscar Gil)

La hora de actuación de los californianos estuvo marcada por los problemas técnicos que se sucedían tema a tema. Aun así el quinteto sacó adelante una buena actuación que se coronó con cortes como  la imprescindible “Bonded By Blood”, “The Toxic Waltz” o “Strike Of The Beast”. Tuvieron tiempo incluso para la interpretación de una particular versión del “Motorbreath” de Metallica.

Testament: demoledores

Cuando todo el material estuvo  en su sitio quedó más que claro quiénes eran los grandes protagonistas. Aunque el listón a esa hora estaba ya por las nubes, pues realmente a ninguno de los grupos del cartel se les puede tachar de teloneros; Testament se dispusieron a elevar el espectáculo a otro nivel.  Los de Bay Area han elevado su producción intentando equiparar su espectáculo al de cualquier otra gran banda. Tarima para la batería, escalones frontales y cañones de humo, que sumado a los típicos cañones de humo y a un juego de luces propio lograron una ambientación bastante aparente.

Testament (Foto: Óscar Gil)

El quinteto ocupo sus puesto con rigurosa puntualidad, siendo el último en aparecer en escena el vocalista Chuck Billy con su particular micrófono con el mástil a la mitad iluminado en rojo y una sonrisa en la cara dio el pistoletazo de salida con “Eerie Inhabitants”. El primer clásico no se hizo mucho de rogar, pues la siguiente en la lista fue “The New Order”. Sobra decir que poco más hizo falta para que gran parte del público se volcase de lleno en los diversos pogos que inundaron la pista durante toda la actuación.

Testament (Foto: Óscar Gil)

Los americanos ofrecieron en esta velada un set muy variado donde la gran mayoría de sus álbumes tuvieron algo de representación. Llegaron así “The Persecuted Won’t Forget” de The Formation Of Damnation (2008), “The Haunting” de su debut ‘The legacy’ (1987) y la que da título a su “Dark Roots Of Earth”. De ese mismo continuó “Last Stand For Independence”. Los guitarristas Eric Peterson y Alex Skolnick desempeñaron una labor fascinante, y junto al bajista Steve Di Giorgio y el Gene Holgan dieron forma a clásicos de la banda como “Throne of Thorns”, que sonaron realmente atronadores. Otra que no podía faltar era “Brotherhood Of The Snake”, corte que da título a su anterior trabajo de estudio.

Testament (Foto: Óscar Gil)

Sobrepasado el ecuador, el carismático vocalista aprovechó para saludar a sus files, así como para descalificar la labor del personal de seguridad del Palacio Vistalegre, no conforme con el trato a algunos miembros del público. De su etapa más reciente cayó también “The Pale King”, preludio de  “Fall Of Sipledome”, corte que hacía demasiado tiempo que no era incluido en uno de los sets de Testament.

 

La tralla continuó con “Night Of The Witch”, tras la que solo quedaban la oleada de clásicos que despediría el concierto. A lo grande sonaron ”Into The Pit”, “Practice What You Preach”, “Over The Wall” y “Disciples Of The Watch” que pusieron la guinda a un gran concierto. Si hay que sacar alguna pega, sería sin duda el sonido, que durante gran parte de la noche llegó a nuestros oídos de manera casi ensordecedora. Por el resto, sus seguidores del thrash metal, salieron de la sala más que satisfechos con la gran experiencia vivida.

Testament (Foto: Óscar Gil)

Texto: Tamara Ruiz | Fotos: Óscar Gil

Promotor:Route Resurrection

Día:2020-02-28

Hora:18:00

Sala:Black Box (Palacio Vistalegre)

Ciudad:Madrid

Teloneros:Death Angel, Exodus

Puntuación:8