Pese a no congregar la misma cantidad de gente que en su última visita a Barcelona 2 años atrás presentando “Battering Ram” ante un Razzmatazz a rebosar donde no cabía ni un alfiler, los inquebrantables británicos Saxon volvían a la Ciudad Condal con un nuevo trabajo bajo el brazo, “Thunderbolt”, desmontando toda teoría que afirme que edad y rendimiento suelen ir de la mano.

El público afín al heavy metal es fiel por definición, pero lo de Saxon es otro cantar. Habiendo venido a nuestro país de forma ininterrumpida cada 1 o 2 años desde principios de los 90 cuando el sueño americano acabó para ellos y decidieron concentrarse en territorio europeo, resulta acaparador ver como ha crecido la banda de Biff Byford y Paul Quinn en nuestro país en los últimos 25 años. Han pasado de tocar en salas de 300/400 personas a mediados de los 90 cuando nadie daba un duro por ellos a reventar salas de gran aforo cuando se supone que deberían estar viviendo su retiro y disfrutando su jubilación, ¿Quién se atreve a dejarlo cuando la banda no hace más que crecer y crecer hasta cuotas de popularidad que no conocían desde mediados de los 80?. Vista la edad de sus integrantes, lo ideal sería pensar que no les quedan muchos tiros por pegar, sin embargo, a tenor de lo visto, a Saxon todavía les quedan unas cuantas giras, eso sí, creo yo deberían reformular algunos aspectos de su directo que más adelante explicaremos.

El pack de gira venía compuesto por los renovados Raven quienes también están viviendo una segunda juventud especialmente desde que editaran “Walk Through Fire” hace una década y los no menos legendarios Y&T, otra banda asidua de los escenarios españoles en los últimos 15 años sobre todo. Por problemas de salud de uno de sus integrantes, Y&T se cayeron del cartel siendo reemplazados por los hard rockeros FM, un cambio interesante para algunos (banda más que vista sale, banda no tan vista entra) aunque decepcionante para otros en tanto que el estilo que proponen los británicos FM (rozando el AOR) dista en términos de dureza y energía del de Y&T, Raven y Saxon.

Calentando motores

Por desgracia no pude ver el arranque del evento de la mano de Raven, quienes apenas tocaron media hora. Sinceramente creo que poseen mucho mayor tirón a día de hoy que FM y la gente que arrastra Saxon es obvio que siente más simpatía por la caña de Raven que por la pomposidad de FM quienes salieron a tocar ante una sala ya bastante concurrida que en su inmensa mayoría dudo mucho hubiese oído hablar nunca de esta banda británica.

FM (Foto: Paco García)

FM tuvieron su pico de popularidad a finales de los 80, pero demasiado efímero como para poder dejar huella 30 años después. Considerados una banda de culto entre los amantes del hard rock, rock melódico y AOR, la banda de Steve Overland salió a escena gozando de un muy buen sonido, una puesta en escena simple que dejaba suficiente espacio en el escenario para moverse libremente y un arranque de concierto de la mano de la nueva “Black Magic” seguida de un buen tándem de clásicos del grupo como “I Belong to the Night”, “That Girl” y “Bad Luck”.

FM Madrid 2018 La Riviera

FM (Foto: Paco García)

FM se mostraban intensos, sólidos, experimentados y a gusto sobre un escenario dejando claro que las tablas adquiridas con los años sirven para algo. Steve Overland, vocalista y ocasional guitarra rítmico, mostraba un estado vocal asombroso mientras el resto del grupo le arropaba a las mil maravillas dejando constancia de su clase y elegancia como músicos. Siguieron los británicos repasando su carrera para cerrar con la clásica “Tough it Out” y la nueva “Killed by Love”, dejando un muy buen sabor de boca entre sus escasos seguidores y aquellos quienes nunca habían escuchado o visto en directo al grupo.

Saxon no falla en concierto

Ya con la sala presentando una notable entrada, Saxon salieron como es costumbre en ellos a arrasar utilizando casi siempre el tema más agresivo de su nuevo trabajo en cuestión, en este caso “Thunderbolt”. El sonido inicialmente era atroz y pese a que se fue puliendo poco a poco, lo cierto es que dista bastante del standard muy superior que suele mostrar la sala Razzmatazz. Para no bajar la intensidad del show, Saxon prosiguieron con “Sacrifice”, otro cañonazo reciente con madera de clásico. “Nosferatu (the Vampire Waltz)” sin embargo, bajó ostensiblemente la intensidad del show y quizá debería haber caído más adelante.

La banda, consciente de ello, volvió a cargarle las pilas al personal de la mano de “Motorcycle Man” mostrando una tendencia que se repetiría a lo largo del show que consiste en intercalar temas nuevos con viejos clásicos, digno de mención en tanto que demuestra la fe que tiene la banda en su nuevo material, pero un tanto atrevido pues el 75% de la audiencia era gente de 40 para arriba que seguramente no ha escuchado nada que haya editado Saxon tras “Solid Ball of Rock”.

Saxon Barcelona 2018

Saxon (Foto: Sergi Ramos)

De este modo, nuevos y recientes cortes como “Predator”, “Battering Ram”, “The Secret of Flight”, “They Played Rock and Roll” y “Sons of Odin” fueron alternándose con clásicos atemporales como “Strong Arm of the Law”, “Solid Ball of Rock”, “Power and the Glory”, “Dallas 1 PM”, “And the Bands Played On”, “747 (Strangers in the Night)”, “Crusader” o “Princess of the Night”. Esta fórmula, bastante común en los sets de Saxon a lo largo de los años, por lo general funciona pues sus últimas obras solían tener una notable consistencia cualitativa, sin embargo creo que existe un consenso a la hora de afirmar que los dos últimos discos del grupo han pegado cierto bajón respecto a sus predecesores. 6 temas de “Thunderbolt” creo que son demasiados, las cosas como son.

Lo antiguo, por favor, mejor

Debido a ello, la audiencia no llegó a despegar en ningún momento pese a que la banda lo estaba dando todo sobre el escenario. Cualquiera que haya visto a Saxon con anterioridad sabrá de la locura que se desata cuando la banda ataca ciertos temas, algo que realmente no llegó a suceder en ningún momento la pasada noche de sábado salvo casos muy puntuales y aislados. Saxon, ajenos a ello, iban a la suya, desgranando temas, pasándoselo en grande sobre el escenario (a la gente le dio por lanzarle chalecos de parches que la banda estuvo poniéndose y luciendo durante toda la noche) y mostrando que el escenario es su hábitat natural tras 40 años de oficio ininterrumpido.

Crónica Saxon Barcelona

Saxon (Foto: Sergi Ramos)

Biff Byford sigue pletórico a sus casi 70 años, corriendo, saltando, incluso haciendo estiramientos y en general pasándoselo pipa como si fuera su primera gira. Paul Quinn, por su contra, rezagado en uno de los laterales e inmóvil como de costumbre, ya hace suficiente con simplemente aguantar 2 horas de pie y esbozar una sonrisa de tanto en cuanto. El contrapeso lo pone el bajista Nibbs Carter, el chavalillo del grupo (pese a sus 52 años), quien no paró de correr, subirse por las tarimas, y hacer headbanging de forma despiadada, algo que seguramente le acarreará algún que otro problema cervical en el futuro pues lleva casi 30 años haciendo lo mismo cada noche. Se acercaba el tramo final del show y Saxon se centraron en soltar la traca final de la mano de “The Eagle Has Landed”, “Heavy Metal Thunder”, “Wheels of Steel” y “Denim and Leather”, esta vez sí, causando el griterío y euforia generalizada.

Sin lugar a dudas fue un gran show, pero Saxon son capaces de más, sobre todo cuando deciden ampliar un poco las miras y repescar viejos cortes no tan típicos y manidos. En esta ocasión la elección del setlist fue floja, centrándose demasiado en un nuevo disco que no parece haber despachado grandes simpatías y una tanda de clásicos demasiado previsible sin sorpresa alguna. Eso puede permitírselo un grupo que no viene muy a menudo por aquí, pero no una banda que ves cada 6 meses y de la que esperas más variedad en su repertorio. En cualquier caso, no son éstas más que objeciones de alguien que los ha visto 20 y pico veces y que necesita de algún revulsivo para poder seguir encontrando una escusa para irles a ver en el futuro.

Saxon Barcelona 2018

Saxon (Foto: Sergi Ramos)

Vista la edad de sus integrantes, lo lógico sería pensar que a Saxon le quedan 3 telediarios, sin embargo, cuando los ves en directo, no cabe la menor duda de que esta banda puede tirar 10 años más si quiere todavía, es difícil pensar que vayan a apagarse de un día para otro. Mientras tanto, disfrutemos de algo que pese a su anacronismo y predictibilidad, tarde o temprano se acabará dejando un vacío irreparable. Larga vida a Saxon.

Texto: Javi Felez | Fotos: Sergi Ramos

Promotor:RockNRock

Día:2018-10-13

Hora:20:00

Sala:Razzmatazz

Ciudad:Barcelona

Teloneros:FM, Raven

Puntuación:7