Saratoga prende fuego a Oviedo

Son ya veintidós las ediciones que se llevan celebrando en la capital del principado del Concurso de Rock Ciudad de Oviedo y, como en las últimas ediciones, cada sesión de aspirantes concluye con la presencia de una banda invitada ya consolidada o en vías de consagración. El primer día de concurso, la organización tuvo a bien invitar a los madrileños Saratoga como maestros de ceremonia.

Poco se puede decir de Saratoga que no se haya dicho ya. Con más de 27 años a sus espaldas son, sin lugar a duda, una de las bandas exponentes del heavy metal nacional. Desde que regresaron con la formación actual (Tete Novoa a la voz, Jero Ramiro a la guitarra, Niko del Hierro al bajo y Dani Pérez a la batería) la banda ha entrado en una dinámica positiva que les lleva a superarse disco tras disco. Si ya su anterior disco, ‘Morir en el bien, vivir en el mal’ (2016) vimos un trabajo descomunal, arrojando un resultado excelente, en el que nos presentaron en esta ocasión, ‘Aeternus’ (2018), dan un paso más hacia la mejor de las direcciones.

Saratoga (Foto: José Antonio Fernández)

Una vez finalizada la fase de concurso y ante la expectación de una plaza abarrotada de gente, comenzó a sonar, pasada la media noche, las primeras notas de la intro que para esta ocasión tenían preparada mezcla de mística clerical y la utilizada en su primer disco ‘Mi Ciudad’ (1997). “Una Vez Fuimos Héroes”, segundo corte del álbum ‘Aeternus” sería la encargada de hacer de carta de presentación tanto del disco como de la banda. Una batería atronadora sirve de introducción a la historia de unos chavales de Vallecas que se quieren dedicar a la música y tienen que luchar para subsistir. Trallazo de tema cargado de intención, doble bombo a trapo y la voz de Tete Novoa explotando sin freno, y es que éste vocalista es increíble en potencia y matices.

Saratoga (Foto: José Antonio Fernández)

Sin tiempo para respirar, espetan “A Morir” como diciendo, ojo que tenemos un pasado. Incluido en su glorioso ‘Agotarás’ (2002), es para muchos su mejor trabajo y uno de los referentes del rock patrio. Tras un correcto saludo y unos pequeños juegos vocales para calentar la garganta de los hasta ahora apagados parroquianos, arrancó “No Sufriré Jamás Por Ti” tema que dejó entrever el cariño que hacia estos guerreros del metal que son Jero y Nico se les procesa. Cada solo, cada riff fueron recibidos con entusiasmo.

Se acabó el calentamiento: quien no esté a 100 que se vaya

Al grito de Tete de “Maldito Corazón” la plaza se viene abajo, y el instinto animal de este frontman se desató en un despliegue de energía característico de sus directos. La guitarra de Jero estuvo sublime en el enardecido solo. La maquinaria denominada Saratoga estaba ya funcionando al cien por cien. Subidón que siguió con un nuevo tapeo de bajo por parte de Niko que desplegó las alas sonoras de “El Vuelo Del Halcón”, tema del primer disco que grabó Tete con la banda en 2007.

La cosa había cogido ya temperatura y era cuestión de mantener la llama hasta el final, pero claro, no a costa de quedar deshidratado y menos pudiendo lanzar un guiño al público “Alguien que suba una sidra por aquí arriba, hostias, que ya está bien de Mahou todo el verano”. Había llegado el momento de lanzar otro de los nuevos temas: “Tres Ahorcados”, todo un bombazo que, si bien se mantuvo melódicamente al alza, destacó la figura de Jero y las composiciones para guitarra que se encuentran en esta canción.

Saratoga (Foto: José Antonio Fernández)

“Las puertas del cielo” se abrieron y los asistentes ardieron con el metal frenético del aclamado tema del ‘Agotarás’, un tema emblemático en la carrera de esta banda que llevó sin dilación a la presentación de los miembros de la banda y al solo de batería del magistral Dani.

Saratoga (Foto: José Antonio Fernández)

De vuelta a la tierra, Tete quiso dedicar un tema a “todos aquellos que no pillaron cacho en el verano”, pidió que bajasen las luces del escenario quedando en la mínima expresión y a la vez solicitó al público que encendiesen las linternas de sus móviles para crear un ambiente íntimo, momento en el que Jero tañó los primeros acordes de “Si Amaneciera”, la sensible balada que grabaron para su ‘El Club De La Lucha’ (2004), que encadenarían con el medio tiempo de “Acuérdate De Mí” de Aeternus. Dos canciones con quince años entre uno y otro, que armonizaron sin que se notase conflicto alguno entre un tema clásico y otro actual.

Las guerras no se ganaron con treguas

Llegó la hora de saltar al son de “Vientos De Guerra” del disco homónimo de 1999, que con sus demoledores riffs a al ritmo de una batería devastadora no dio tregua alguna. Si Dani disfrutó de sus minutos de gloria y Jero deslumbró toda la noche, había llegado la hora de que Niko cogiese las riendas para hacernos partícipes de un solo a la altura de unos pocos. Virtuosismo sin paliativos el de este veterano músico que dejó una pequeña muestra de su excelente dominio a las cuatro cuerdas, y que enlazó con la intro del tema “Si Tú No Estás” del último disco y que remataría el propio Niko con otro momento bajo.

Saratoga (Foto: José Antonio Fernández)

Con un “Dani, quema Oviedo”, arrancaría el frenético tema “Resurreción” con un Tete dándolo todo, arengando al público y mezclando agudos con tremendos guturales. Tras un breve descanso, volverían a las tablas para regalarnos un esperado y coreado “Perro Traidor” al que seguiría “El Olvidado De Dios”, épico y ya todo un clásico, donde Tete desgrana esa excelsa voz con distintos registros que nos dejaron a todos boquiabiertos.

Saratoga (Foto: José Antonio Fernández)

El bolo llegaría a su fin con otro atemporal y grandioso tema, el “Como El Viento” de su anterior disco ‘Morir el bien, Vivir el mal’ Hora y media aproximadamente de show en el que descargaron quince temas, entre ellos cinco del nuevo disco ‘Aeternus’. Un soberbio trabajo que eleva, aún más, la bien ganada reputación de Saratoga de poseer uno de los directos más brutales del panorama nacional.