Saratoga fue “a morir” en su 30º aniversario en Madrid

Si hace 30 años alguien le hubiera dicho a Niko del Hierro que iba a convertirse en historia viva del metal español seguramente no se lo habría creído. A día de hoy, sería básicamente imposible narrar Ia historia del metal patrio sin la figura de Saratoga, siendo una de las formaciones más sólidas y trascendentes que ha dado nuestro país.

Mantenerse tres décadas en la cima no es tarea sencilla, menos aun cuando en el camino ha habido innumerables baches, e incluso con una separación de por medio. Pero si de algo puede alardear el cuarteto madrileño es de haber sabido exprimir al máximo las cualidades de todos los músicos que han pasado por sus filas, manteniendo su identidad impecable.

El sábado 22 de octubre de 2022 se consagró no solo como una gran fiesta, sino con un gran homenaje, que, además quedaría grabado para la posteridad en forma de DVD, pues un aniversario así no se celebra todos los días, ni tampoco el hecho de conseguir un “sold out” es una de las salas más imponentes de la capital.

30 mágicos años de heavy metal

Cabía esperar que un concierto de tal magnitud no iba a iniciarse como cualquier otro. La intro se convirtió en un recopilatorio de declaraciones a manos de algunos de los artistas que han pasado por la banda, al tiempo que “Si Amaneciera” sonaba de fondo; y de hilo conductor el bonito sentimiento que han compartido los músicos (Fortu Sánchez, Joaquín Arellano “El Niño”, Leo Jiménez o Tony Hernando) en su estancia en Saratoga.

Saratoga (Foto: Tamara Ruiz)

Sin más dilación “Tras Las Rejas” hizo estallar la euforia de una Riviera, que en ese momento era comparable a una olla a presión a punto de estallar. “A Morir” llegó segundo más tarde sin apenas respiro entre temas, para acabar de rematar lo iniciado en el tema anterior. Huelga decir que aquel mítico ‘Agotarás’ tendría un peso especial en el set, disco que les aseguró de por vida un puesto en lo más alto hace ya la friolera de 20 años.

Saratoga (Foto: Tamara Ruiz)

Una de las cosas buenas que trae consigo la longevidad de una banda es la unión de varias generaciones, no solo de padres e hijos, si no la salida de diferentes cortes a lo largo del tiempo como “No Sufriré Jamás Por Ti”, un referente de su era contemporánea que haría de puente para “Maldito Corazón”. Este corte no es solo una de las piezas claves del heavy metal español, si no que sirve para que Tete Novoa de muestra de su gran estado vocal y lance al aire los agudos más altos noche tras noche.

Saratoga (Foto: Tamara Ruiz)

“A Sangre Y Fuego”, una de las perlas del ‘Vientos de Guerra’, dejada en el tintero en giras pasadas dio paso a la imprescindible “El Vuelo Del Halcón”. Indispensable en la historia de Saratoga y que marcó un irremediable punto de inflexión tras la salida de ese ‘VII’ comandado por primera vez por Tete Novoa. Un relevo en las voces que traería consigo un sinfín de críticas, que paulatinamente ha ido disipando el tiempo y la impecable labor del vocalista. Le pese a quien le pese es el más longevo de los que han pasado por el line -up del grupo con 15 años a sus espaldas.

Saratoga (Foto: Tamara Ruiz)

“Morir En El Bien Vivir En El Mal” fue de las más inesperadas, una de las pocas que no fue regrabada en ‘XXX’ disco conmemorativo lanzado por el aniversario. La primera sorpresa se hizo algo de rogar. “Perro Traidor” contó con la presencia de los hermanos Escobedo -Jorge a guitarra y Carlos a la voz- sobre las tablas, que dejaron el pabellón muy alto al resto de personalidades que aparecerían a continuación.

Saratoga (Foto: Tamara Ruiz)

“Lejos De Ti” permitió levantar el pie del acelerador, todo un reto elegirla entre el catálogo de cortes lentos, narraba Novoa, sin contar con su balada por excelencia, claro está. Un solo de batería a manos del recién incorporado Estepario Siberiano. Quien ha pasado de estar detrás de las pantallas en su rol de youtuber se ha amoldado como la ultima pieza de un puzle a sus compañeros, aportando frescura y crudeza al grupo con su calidad.

De Madrid a «las puertas del Cielo»

Por supuesto no podía faltar la imprescindible “Las Puertas Del Cielo” preludio para presentar a Víctor García y Pablo García de WarCry, que, pese a no ser madrileños como los grandes protagonistas, bordaron “Mi Ciudad”, adornada con imágenes de la capital en la trasera.

Saratoga (Foto: Tamara Ruiz)

“Si Tú No Estás” del ‘Aeternus’ fue la pincelada moderna antes de “Vientos De Guerra”, que se alzó como uno de los puntos álgidos de la velada. Presentado como una de las principales influencias para Tete, se personificó Leo Jiménez entre vítores en el escenario para interpretar el citado tema y “Si Amaneciera”, que, para más inri, acompañó a las teclas Pepe Herrero (Stravaganzza). La fiesta continuó con las potentes “El Olvidado De Dios” y “Como El Viento”, que sin ser de las más coreadas mantuvieron las revoluciones en lo más alto.

La perla que se esconde bajo el nombre de “Rojo Fuego” dio la bienvenida a la traca final, donde las afiladas guitarras de Jero Ramiro abrieron paso a “Resurrección”. No se podía acabar la noche sin que Tete Novoa se diera un baño de multitudes, y para la ocasión contó con una balsa tuneada con la que surfeó a manos de los asistentes.

Saratoga (Foto: Tamara Ruiz)

A estas alturas de la película Saratoga tiene poco que demostrar a nadie. Lo acontecido en la Riviera fue una noche para el recuerdo, a la que pocos peros se le pueden sacar. ¿Qué más se le puede pedir a una banda que roza la perfección en el escenario?  No solo merecieron la pena las más de dos horas de disfrute, sino que la ocasión era una de esas tildadas como únicas e irrepetibles. 30 años de una leyenda a la, visto lo visto, aún le quedan muchos años más por celebrar.