Ross The Boss: El jefe manda en Barcelona
Tras visitarnos el año pasado en un show memorable en el Razzmatazz 3 y dejarse caer por el Rock Fest de este pasado verano, el ex guitarrista de Mamowar Ross the Boss volvía a la carga con una nueva gira europea presentando su nuevo trabajo en solitario “By Blood Sworn” (editado por AFM a primeros de año) acompañado de dos bandas atractivas y con cierta solera como Crystal Viper y en mayor medida Bullet.
Por desgracia, no llegué a tiempo para ver a los polacos Crystal Viper quienes venían promocionando su última obra “Queen of the Witches”. El tráfico, la dichosa ronda litoral, la dificultad de aparcar en la zona y venir de fuera de la ciudad imposibilitan por lo general ver a las bandas que entre semana abren los conciertos a horas cada vez más tempranas.
A Bullet sí llegamos
Con Bullet ya atronando en el Bóveda, entramos en la sala para degustar la actuación de una formación muy querida por aquí y asidua de los escenarios estatales. Creo haber perdido la cuenta de la de veces que los suecos han pisado Barcelona, 4 o 5 si mal no recuerdo. En esta ocasión venían presentando “Dust to Gold”, su sexto LP en estos más de 15 años de carrera. Siendo como son una eterna promesa, es una lástima que bandas con su potencial no logren despegar todo lo que deberían.
El problema quizá reside en que no existe factor sorpresa alguno, todo lo que hacen los suecos en el estudio y sobre el escenario está más que hecho ya por gente como AC/DC, Accept, Krokus, Judas Priest o cualquier otro emblema de los 70/80’s, lo que irremediablemente les relega a un papel de meros clones, entretenidos, con temas pegadizos y potentes, pero clones a fin de cuentas, algo que es difícil que cuaje entre el gran público a estas alturas de la película.
Con un sonido bastante nítido y contundente, diría que mejor incluso que el de Ross The Boss, los suecos fueron desgranando poco a poco su repertorio que a la postre duraría tanto o más que el del propio cabeza de cartel. Capitaneados por el vocalista Dag y el guitarra Hampus, Bullet tardaron poco en ponerse al público de su lado gracias a temas fáciles de digerir, pegadizos y que están hechos para funcionar a las mil maravillas en directo, interactuando con el público en todo momento y dejándose llevar por una audiencia cada vez más contagiada y metida en su música.
Centrándose sobre todo en su última obra “Dust to Gold”, del que interpretarían como es lógico 6 o 7 cortes, los suecos echaron la vista atrás y recuperaron viejos clásicos del grupo como “Stay Wild”, “Turn it up Loud”, “Rolling Home”, “Dusk Til Dawn” y obviamente su tema más conocido “Bite the Bullet” que cerró una excelente actuación y caldeó el ambiente suficiente para el cabeza de cartel, el señor Ross The Boss.
El jefe llega a la ciudad condal
Ante un aforo de dos tercios de la sala Bóveda, el que fuera guitarrista y principal compositor de Manowar durante toda la década de los 80 se presentaba ante sus incondicionales con la misma formación que ya nos visitó hará cosa de año y medio. En aquella ocasión Ross tiró exclusivamente de Manowar mientras que ayer noche presenciamos un set parecido, pero con un par de temas nuevos de su última obra en solitario “By Blood Sworn” intercalados en el tramo central del show y que casaban perfectamente con el sonido y la potencia de los grandes hits de Manowar.
Abrir con “Blood of the Kings” es jugar a caballo ganador y Ross lo sabe. Si a ello le encadenas “Death Tone”, “The Oath” y “Sign of the Hammer”, ya tienes medio bolo hecho. El sonido no era tan bueno como en Bullet; la guitarra de Ross sonaba algo sucia y a Mike LePond ni se le escuchaba, errores estos que fueron subsanándose poco a poco. “Hatred” marcó el contrapunto y bajó un poco las revoluciones, pero “Wheels of Fire” se encargó de poner la sala a 100 de nuevo con su estribillo coreado al únisono por la enloquecida audiencia.
De nuevo la banda, de la mano de “Bridge of Death”, pondría el freno dando algo de aire a su vocalista Marc Lopes y sobre todo a Ross quien pese a conservarse bastante bien, no deja de tener 64 años ya. Tras la calma llegó la tormenta de la mano de un par de cortes nuevos, “This is Vengeance” y “Fistful of Hate” que pese a no tener el encanto del repertorio de Manowar, aguantan muy bien el tipo entre tanto clásico.
Para el tramo final del show, Ross y su banda dejaron la artillería pesada, esa retahíla de clásicos que todo el mundo se sabe al dedillo y que interpretados por esta banda hacen palidecer incluso a los propios Manowar quienes llevan años, por cierto, a un nivel de directos bajísimo, algo inconcebible para una banda de su trayectoria y envergadura. De este modo, la locura colectiva se apoderó de la sala a ritmo de “Blood of my Enemies”, “Kill With Power”, “Thor”, “Fighting The World” y el fin de fiesta con “Battle Hymn” y “Hail And Kill”.
Visto lo visto, es una lástima que la cara más creíble, honesta y auténtica del legado de Manowar tenga que gozar de un 5% de la popularidad de su banda madre, pero en tanto a Ross le de igual y siga deleitándonos con este tipo de giras de pequeño formato repleto de clásicos, servidor no echará en falta la pronta y anunciada defunción de la banda de Joey DeMaio y Eric Adams.
Texto: Javi Félez
Promotor:Madness Live
Día:2018-10-18
Sala:Bóveda
Ciudad:Barcelona
Teloneros:Bullet, Crystal Viper
Puntuación:8
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.