Tres palabras: Rock, And, Roll con Rose Tattoo
Doce años han tenido que pasar para que los australianos visitaran de nuevo estas tierras. Después de actuar en la sala Razzmatazz 2 el año 2007 y ante un escaso público, los pioneros del rock ‘n’ roll brillaron anoche, acompañados de los canadienses The Wild!, que también dieron mucho que hablar.
El exterior de la sala Salamandra se mostraba despejado apenas media hora antes de la apertura de puertas, programada para las 19:30, lo cual dio a suponer que esta ocasión no sería diferente de la última vez que los vimos en la ciudad condal, nada más ni nada menos que en el año 2007 con la gira de presentación del ‘Blood Brothers’, concierto que se llevó a cabo en un ambiente, digamos, familiar. Tras su paso por Madrid y por el Leyendas Del Rock en Villena apenas unos días antes, las expectativas se seguían rebajando a esperar a ver unos Rose Tattoo entregados pero no sobresalientes, dados algunos comentarios un tanto maliciosos que se extendieron después de dichos conciertos.
The Wild! Todo un descubrimiento
Con la apertura de puertas el público fue entrando sin llegar a llenar media sala, y fue entonces cuando los canadienses The Wild! salieron a escena. The Wild! era una banda desconocida para gran parte de los presentes y muchos de ellos se preocuparon de realizar una breve búsqueda de última hora para saber quiénes eran los afortunados en acompañar a Rose Tattoo por su paso en España.
Tal fue así que, minutos antes de empezar el espectáculo, los comentarios de aprobación por parte del público se extendieron en seguida por el lugar. Con poca gente, pero entusiasmada por ver qué ofrecerían los canadienses, el show arrancó con una fuerza implacable. La banda, capitaneada por el carismático Dylan Kirouac repasó los temas más emblemáticos de sus tres trabajos entre movimientos exagerados y headbanging de lo más brusco.
Y la verdad, su música es rock ‘n’ roll clásico de toda la vida, fiestero y potente, pero lo que los hizo destacar anoche fue su puesta en escena, ya que era verdaderamente difícil quitar la mirada del derroche de energía que dedicaban a cada canción. Todo esto, junto al hecho que se mostraron entregados en todo momento y dispuestos a animar y a conquistar el público, The Wild! demostró tener, como banda telonera, el potencial de eclipsar a otros cabezas de cartel con facilidad.
Las leyendas en escena
Después de que The Wild! dejaran electrizados a los presentes y durante el cambio de escenario, la sala parecía otra. Inesperadamente la gente no paró de entrar hasta abarrotar Salamandra. Fue entonces y sobre la hora prevista cuando Rose Tattoo pisaron el escenario. Hablamos de una banda que inició su carrera en los setenta, unos pioneros del rock ‘n’ roll en toda regla y compatriotas de otro de los grupos más punteros de la historia de la música rock.
Aunque su imagen no tuvo tanta proyección, se han mantenido activos desde entonces y hace años ya que lograron consagrarse como banda mítica y referente a nivel mundial de este estilo musical. Claro está, una banda con tal trayectoria y, ya sea por motivos de salud, defunciones o proyectos que sus antiguos miembros pudieran tener, Rose Tattoo ha sufrido innumerables cambios de formación.
Los Rose Tattoo que visitaron Barcelona anoche estaba compuesta de Dai Pritchard, guitarrista des del lanzamiento de su último álbum de estudio hace más de una década, Bob Spencer, también a la guitarra y el legendario Mark Evans, ex miembro de AC/DC, como bajista. A la batería había un joven Jackie Barnes, que los acompaña des del año pasado y que se mostró, con diferencia, mucho más energético que sus añejos compañeros. Finalmente, el único miembro original de la banda y la cara visible de esta, Angry Anderson, que llevó la batuta en todo momento.
“Bad Boy For Love” estrenó el espectáculo al estilo de la vieja escuela y ante un público expectante y suplicante de temas clásicos, y así fue como prosiguieron con “Scarred For Life”, del disco homónimo lanzado a principios de los ochenta. A partir de ese momento y empalmando tema con tema, fueron desmenuzando un setlist compuesto de canciones de álbumes como el que se acaba de mencionar y el ‘25 To Life’, como “One Of The Boys” y “Juice On The Loose”.
“Assault & Battery” sonó arrolladora e hizo que la sala explotara en júbilo, seguida de “Tramp”. Angry Anderson, a pesar de su edad, se entregó al show tanto como pudo, aunque en ocasiones parecía un tanto fatigado y deseoso de reposo, sobretodo en los fragmentos donde la voz no era necesaria, como en los sencillos pero cautivadores solos de guitarra. Por otro lado, y sorprendentemente, mantiene su voz en buen estado a pesar del paso de los años.
Fue Angry también quien decidió obsequiar a los espectadores con múltiples botellas de agua mientras él prefería hidratarse con el contenido de una botella de color verdoso, llena de alguna bebida alcohólica, que le acompañó durante toda la noche. La locura se desató tras las primeras notas de “Rock’n’Roll Outlaw” y mantuvieron el listón alto al tocar a continuación “The Butcher And Fast Eddie”. Se produjo entonces una bajada de potencia al recitar, como dijo Angry, lo que iba a ser una storytelling time, que de breve tenía poco y se erigía sobre una base instrumental de blues rock de fondo mientras el vocalista contaba hechos que sucedieron ahora ya hace mucho tiempo.
Finalmente, esta parada desembocó en “Once In A Lifetime”. Seguidamente, “Rock ‘N’ Roll Is King” y “Sweet Love” levantaron de nuevo el ánimo de los fans, que llevaban el ritmo alegremente dando palmadas al aire, e incluso algunos se atrevieron con el crowdsurfing. “1854” no fue una excepción y se mantuvo en esta línea y, antes de seguir con las pocas canciones que quedaban pendientes para cerrar la noche, Angry se detuvo a presentar a sus secuaces.
Los tres temas restantes actuaron como traca final para rematar una noche de puro rock ‘n’ roll, con “Snow Queen” en cabeza y seguida por las míticas “We Can’t Be Beaten” y “Nice Boys Don’t Play Rock ‘N’ Roll”, esta última con la colaboración de The Wild!, igual de energéticos que durante su actuación. Ambas bandas se despidieron y abandonaron escena, lo cual hizo creer que ya no había nada más que ver, aunque las impresiones de la noche eran muy buenas, sobretodo por el final explosivo que acababa de tener lugar. En breves, pero, Rose Tattoo aparecieron de nuevo para finalizar, de una vez por todas, su concierto. “Astra Wally” fue el tema elegido para despedirse del público barcelonés, canción del álbum ‘Rose Tattoo’, su álbum debut.
Tanto The Wild! como Rose Tattoo ofrecieron espectáculos animados, dinámicos y potentes, los primeros al darse a conocer como banda emergente dentro de un estilo musical que no está de moda, pero que nunca se extingue, y los otros se coronaron, de nuevo, como unos de los grandes del rock. Cabe resaltar una vez más la gran asistencia y el buen sonido que tuvieron ambas bandas, en parte también por la buena acústica de la sala. En conjunto, fue una noche en que reinó la diversión al puro estilo rock ‘n’ roll.
Texto: Marina Salcedo | Fotos: Elena Marco, Paco García y Javier Puntas
Promotor:Madness Live!
Día:2019-08-09
Hora:19:30
Sala:Salamandra
Ciudad:Hospitalet de Llobregat, Barcelona
Teloneros:The Wild!
Puntuación:8
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