Primal Fear: puro heavy metal en Madrid

Primal Fear celebra su veinte aniversario con una gira que ayer llegó a la Sala Mon Live de Madrid. Junto a Existance y Riot V, los alemanes hicieron sonar clásicos como "Metal Is Forever".

Los escenarios de todo el mundo han visto a Primal Fear darlo todo a lo largo de los últimos veinte años. Y para celebrarlo, este año han elaborado una gira que ayer pasó por la Sala Mon de Madrid. Alemania vio nacer en 1997 a esta banda que hoy está formada por el mítico Ralf Scheepers, Magnus Karlsson, Alexander Beyrodt, Mat Sinner y Francesco Jovino. A través de los años su estilo ha ido viajando entre el más puro heavy metal afincado en sonidos influenciados por los aclamados Judas Priest, y el power metal exprimido al estilo Gamma Ray.

¡Y no podía ser de otra manera! Ralf Scheepers fue el cofundador de los ruidosos rayos gamma en 1989 junto con al veneradísimo Kai Hansen después de abandonar su proyecto en Helloween. Ocho años más tarde, Scheepers comenzó su aventura junto a Primal Fear gozando de apoyos tan grandes como los de Nuclear Blast y girando en sus primeros años por su país natal y otros países del norte de Europa, donde su enfoque siempre estuvo muy bien valorado. Ahora giran por todo el mundo, y ayer deleitaron a la capital madrileña con temazos tan importantes para el género como «Metal Is Forever» o «King Of Madness» acompañados de Existance y Riot V. Pero entremos en harina que a eso hemos venido.

Me he dejado el hacha en casa ¿Me lo prestas?

¡Espera, espera! ¿He leído bien? ¿Existance, Riot V y Primal Fear en la misma sala? ¿La misma noche? Y yo me he dejé el hacha en casa. Pero nada de qué preocuparse, porque en este tipo de espectáculos únicos el público desprende tal energía y pasión metalera, que sin querer te prestan su hacha mental para darlo todo. Al final de la noche te ves envuelta en un ambiente al que es difícil echar el cerrojo. Y decir con convicción ¡Me marcho a casa! es imposible.

Corría la cerveza en la Sala Mon, también corrían los chalecos customizados con parches de Judas Priest, Iron Maiden y Gamma Ray ¡En abundancia! ¿Pelo corto? Pocas personas. Y algún que otro perdido con camisa de cuadros de aficionado al vino en copa ¡Una especie en extinción! La media de edad: Cuarenta ¿Y qué? Porque había niños y niñas disfrutando, y veinteañeros y veinteañeras que aún aprecian a los clásicos. Además de los sesenteros/as y setenteros/as que no pudieron perderse tal propuesta escénica.

Existance: Dando en el clavo

La apertura de Existance no pudo dar más en el clavo: Jóvenes, amantes del heavy metal clásico y con ganas de conservar un poquito de lo mejor de los ochenta en 2008. Motivo por el que Julian Izard creó esta banda. Bajo canciones como «Heavy Metal Fury» o «Death Or Alive» se ganaban al público de la Sala Mon con un sonido muy bien conservado y una técnica vocal muy similar a la de Bruce Dickinson con Iron Maiden.

Existance (Foto: Paco García)

Difícil examen ante los clásicos más clásicos, superado. Así pues, se convierten en una buena opción barajable ante la inminente necesidad de renovación de bandas conservadoras y defensoras del sonido añejo. Como ellos, coge los clavos de metal y clávate su nombre bien en la mente porque después de esta gira junto con los grandes Riot V y Primal Fear seguirán ofreciendo bolos por Europa.

¡Me sobra la camiseta! Soy un Dios del metal

Del campo de batalla salen Existance para delegar el hacha del poder a Riot V: la renovada y evolucionada Riot. Norteamérica sale a escena y a la mente nos vienen águilas, banderas yankis ondeando a cámara lenta y héroes de cómic. No ocurrió esto, pero casi, casi.

Riot V (Foto: Paco García)

Todd Michael Hall ¿Te suena? No es Iron Man, no es Batman, no es Thor. Es el vocalista de los nuevos Riot. Y con su particular y contagiosa fuerza, y sin su camiseta sobre el escenario la noche de ayer, podría pasar por Mel Gibson en El Patriota. Por esto y por mucho más, el público de la Sala Mon lo dio absolutamente todo durante la actuación de estos clásicos del heavy metal. Tocaron algunos de sus temas más conocidos como «Warriors» o «Victory».

Riot V (Foto: Paco García)

Sin embargo, el punto álgido de su actuación tomó forma con «Thundersteel», una de la canciones más importantes y una de las canciones que están en la lista de ‘¿Cómo ser metalero? Empieza con «Fear Of The Dark» de Iron Maiden y «Thundersteel» de Riot’. En aquel momento y para cerrar su actuación, los americanos convirtieron a todo el público en su séquito de focas con cuerpazo de infarto gritando al son de la preservación de los clásicos, los warriors y los hammers ¡Imprescindible verlos una vez en la vida!

¿Esto es el Wacken o la Sala Mon?

Aproximadamente hora y media estuvo Primal Fear en el escenario. Sobre las 21:00h de la noche de ayer, subían los alemanes para abrir con «Apocalypse» uno de los temas que podemos ver en su último trabajo presentado hace apenas dos meses.

Primal Fear (Foto: Paco García)

Con la Sala Mon casi hasta los topes y por supuesto, con asistentes que aún seguían llegando, continuaron con uno de sus clásicos «Final Embrace». La banda se fusionó con un excelente sonido que la sala pudo ofrecer. Y es que a pesar de parecer un recinto bastante arcaico, se ajustó un sonido casi perfecto para una victoriosa celebración de este veinte aniversario.

«Chainbreaker» y «Blood, Sweat & Fear» sonaron seguidas. Y bien siendo cierto que el público se entregaba a tope, Ralf Scheepers y los cuatro componentes de la banda apenas hablaron en toda la noche. En ocasiones, no hace falta hablar, solamente, la empatía, las miradas, el feedback también clásico con el público, es suficiente. Y así con «Face the Emptiness» y » Hounds of Justice», siguió el bolo entre «oe, oe, oes» y «lo, lo, los» muy tipical Spain, que hacían que Ralf y cía se viniesen arriba a cada minuto bañándose con el cariño de las masas.

Primal Fear (Foto: Paco García)

En canciones como «The Ritual» se notó la gran capacidad vocal del cantante. Que a pesar de tener ya una edad, sigue llegando a cada nota sin casi necesidad de descanso. De hecho, la banda al completo está en plena forma y cada canción como «Under Your Spell» o «Nuclear Fire» sonaron poderosas y enérgicas. «Eye of the Storm» sonó justo antes de otro de los temazos de la noche «King of Madness». Ambos fueron coreados por un público, más que entregado. Y es que, no sé que tienen las bandas de heavy metal alemán que conectan muy bien con sus fans y que ponen toda la carne en el asador en cada ocasión.

Primal Fear (Foto: Paco García)

Ayer una sala con capacidad para un número razonable de personas, en ocasiones, gracias a la actividad de la banda, parecía ser el Wacken Open Air donde acuden más de 70.000 ¡Épico! Solo faltaba el barro. «The End Is Near» duró mucho más de lo que dura la canción en álbum, pues fue uno de los momentos aprovechados por el vocalista para descansar y recuperar aliento. Además, a su vuelta decidió jugar de nuevo a gritar el nombre del tema para luchar por el título a ‘mejor público’ contra los barceloneses, que durante el viernes disfrutaron del mismo show.

Primal Fear (Foto: Paco García)

Llegando el final, sacaron a la luz «When Death Comes Knocking». Y con «Metal Is Forever» levantaron cada mano de la sala en forma de cuernos para dejar claro que el concierto estaba gustando. Este tema es otro de los más importantes de la cultura metal y dio de lleno en los metalhearts de cada uno de los espectadores allí presentes. Tras unos minutos de despedida, volvieron al escenario con «Fighting the Darkness» y otro de sus clásicos, «Running in the Dust», que al dar sus últimos latigazos dejaba ver la pena general por lo rápido que había pasado el tiempo.

Mucha energía y poca WiFi

Dos cuestiones a destacar de este concierto, que no tiene tanto que ver con la banda y su indiscutible puesta en escena, son:

• La energía de su público, que contribuyó en todo momento a un ambiente festivo, de diversión, educación e interacción entre ellos mismos. Buen rollo, heavy metal y disfrute sin empujones, sin malas caras y sin presión hacia el escenario.
• La segunda, la falta de móviles. Solamente en dos ocasiones muy concretas pudimos ver la presencia de móviles: En «Metal Is Forever» y en «Running In The Dust». En el resto del show, cada una de las personas disfrutaban de cada segundo del concierto plenamente ¡Menos yo! Que apuntaba cada cosita para poder contarlo hoy aquí.