Moonspell triunfan por enésima vez en Madrid
La elegancia y oscuridad de Moonspell volvían a hacer acto de presencia por nuestro país una vez más. Quienes son considerados el máximo exponente del metal portugués regresaban a la capital junto a Rotting Christ para dar forma a una de esas veladas que son difíciles de olvidar.
Moonspell y Rotting Christ forman uno de esas parejas que acostumbran a girar juntas (o uniendo fuerzas con bandas del estilo) y que forman un combo que tiene un valor asegurado en cada directo. No son agrupaciones complicadas de ver por territorio español, pero sin embargo cada vez que anuncian gira la asistencia de sus fieles está garantizada. Para la ocasión contaban con un tercer nombre en el cartel, Silver Dust, quienes se encargarían de abrir romper el hielo cada noche. El recinto elegido fue la sala Mon, que contó con una asistencia de público bastante notoria desde primera hora de la tarde, estando la pista hasta arriba para el momento de la actuación de los cabezas de cartel.
Un espectáculo medido al milímetro
Con puntualidad al estilo británico, a las 19:00h hacían acto de presencia Silver Dust. La agrupación suiza visitaba nuestras tierras por segunda vez, tras haber actuado junto a Lordi en la misma sala hace cosa de un año. Uno de los pilares en los que se basan las actuaciones de la banda es en la parte escénica y visual. Aparte de las gótico/victorianas vestimentas de los integrantes del grupo, el escenario cuenta con una pantalla decorada a modo de espejo antiguo donde aparecen distintas imágenes durante el show.
Estas sirven a modo de nexo e hilo conductor a través de las distintas canciones que va interpretando la banda, asimismo se emplean para presentar a los distintos personajes que aparecen en escena junto a la banda en distintas partes del espectáculo. Una propuesta con la que la banda busca salirse de los cánones habituales y mantener la atención del respetable durante la totalidad del tiempo del show. Tarea complicada que pocas bandas logran (más aun siendo teloneros) y que los suizos consiguieron.
Musicalmente hablando, Silver Dust desarrolla un metal gótico que mezcla toques tradicionales con algún que otro tinte más moderno. Bastante acorde con la música de Moonspell. Con respecto a su actuación anterior, esta vez el cuarteto ha escogido temas más contundentes, siendo protagonistas los de su último trabajo de estudio titulado ‘House 21’. En medio de su lista de canciones, pudo encontrarse un fragmento de la “Toccata And Fugue In D Minor” de Bach, interpretada por el frontman Lord Campbell a la guitarra. Dicho vocalista no solo mostró sus dotes con las seis cuerdas, sino que mantuvo una actitud impecable junto a sus compañeros durante toda la actuación. Una pena que no tuvieran suficiente espacio en el escenario para poder moverse con más naturalidad.
Rotting Christ desata la locura
La agrupación griega daría forma al show más contundente de la velada. La banda de los hermanos Tolis puede alardear de no necesitar ningún tipo de parafernalia adicional para ofrecer un concierto de sobresaliente, cosa a la que nos tienen acostumbrados desde hace años. Tras un cambio de backline, que tomaba menos tiempo de lo previsto, la actuación de los atenienses comenzaba con “666”. Poco más hizo falta para desatar la euforia y los pogos que se formaron durante todo su show en medio de la pista.
El cuarteto regresaba a Madrid un año después de su última visita (junto a Watain) para presentar su último trabajo de estudio: “The Heretics” del cual nos regalaron cortes como “Dies Irae” y “Fire, God And Fear”. No faltaron temas de sus anteriores trabajos como “Apage Satana” del ‘Rituals’ o “In Yumen-Xibalba”, rescatada del ‘Kata ton Demona Eautou’; partes fundamentales de sus setlist. Uno de los puntos álgidos de su actuación fue la interpretación de “Societas Satanas”, que anunciaba el líder de la banda, Sakis Tolis, para el deleite del respetable.
Como en un abrir y cerrar de ojos se consumieron los 60 minutos de actuación de Rotting Christ, que dejó al público con ganas de mucho más. “Non Serviam” pondría el broche de oro al show, y serviría además, como homenaje al 25 aniversario de este álbum. El cuarteto pasaría la prueba de fuego de salir a la carretera con una nueva formación, que completan a día de hoy Kostas Heliotis al bajo y Jon Kal a la guitarra. Su black/death se coronó, con permiso de las otras dos bandas, dando vida a la mejor actuación de la noche.
Moonspell lanzan su oscuro hechizo una vez más
Como vienen haciendo desde la pasada gira, “Em Nome Do Medo” es la elegida por Moonspell para encabezar el set. Al tiempo que los cuatro músicos que componen la base instrumental de la banda se colocaban en sus respectivas posiciones, el vocalista Fernando Ribeiro aparecía en escena. Lo hacía candil en mano, para alumbrar la penumbra del escenario.
Entre los vítores del respetable caía “1755”, tema que da nombre a su último trabajo de estudio. Siguiendo con la línea teatral, el señor Ribeiro mostraba esta vez una máscara como si de un médico de la peste negra se tratase. Encuadrada en el mismo disco, la siguiente en llegar era “In Tremor Dei” para dar paso a la aclamada “Opium” y minutos más tarde a “Awake”.
Las melodías oscuras y contundentes tomaban el relevo con “Night Eternal”. Llegados a este punto, el frontman anunciaba la llegada de dos temas algo más inusuales, “Mute” y “Abysmo”. La razón era bastante simple, y es que la banda toca en la capital cada año (o incluso con más frecuencia), por lo que es de agradecer que se molesten en cambiar el setlist de la gira solo para nosotros. Aunque está claro que sus fieles hubieran salido contentos de la actuación de los portugueses de todos modos.
“Breathe (Until We Are No More)” sirvió para el destaque del teclista Pedro Paixão, mientras que “Everything Invaded” y “Evento” nos introducían de lleno en la recta final del concierto. Esta última, interpretada en portugués como la totalidad del disco ‘1755’. Lejos de espantar a la clientela de Moonspell, este disco les ha dotado de más popularidad aún si cabe, permitiendo al quinteto expresar sus sentimientos de manera más clara. La oscuridad seguía su curso con “Mephisto” y “Vampiria” inprescindibles canciones de los lusos e interpretada la recién nombrada con un frontman ataviado con una capa que usó para recrear las alas de un murciélago.
Aunque la formación portuguesa se muestre fuerte desde hace muchos años, el peso en los directos recae sobre su frontman Fernando Ribeiro, quien interactúa, interpreta y se mete al público en el bolsillo como quiere. Llegó incluso a mezclarse con sus seguidores en la pista en el estribillo de la imprescindible “Alma Mater”, último tema del primer groso del concierto.
“Todos Os Santos” sería la encargada de encabezar los bises mientras que “Full Moon Madness”, tema fetiche de Moonspell para poner punto final a sus magistrales actuaciones pondría el broche de oro. Si bien la sala no fue un punto a favor para la realización del evento, el transcurso de los conciertos iba llenando de felicidad a los asistentes; a quienes esta oscura velada les iba a ser difícil de olvidar.
Texto: Tamara Ruiz | Fotos: Kaisla Virtanen
Promotor:Madness Live
Día:2019-11-03
Hora:18:30
Sala:Mon
Ciudad:Madrid
Teloneros:Rotting Christ, Silver Dust
Puntuación:9
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