KK Downing: más Priest que Priest en Birmingham

El guitarrista histórico de Judas Priest arrasa en la ciudad que vio nacer el Heavy Metal con su banda KK Priest.

En una época en la que la mayoría de grandes pioneros del rock suben a los escenarios como tristes caricaturas de lo que un día fueron, resulta impresionante pasarse un par de horas contemplando al señor K.K.Downing. Una leyenda que, a sus setenta y un años, sigue manteniendo el mismo empuje que le hizo celebre cuando formaba parte de los insuperables Judas Priest. Un musico que aún conserva acero británico como para regalar y que el pasado sábado siete de octubre, comenzaba nueva gira en casa

El O2 Academy de Birmingham se vistió de gala para recibir el estreno mundial en directo de ‘The Sinner Rides Again’, segundo trabajo en solitario del ex hacha de Judas, que sin duda ha constatado la viabilidad de un proyecto nacido a contracorriente, en tiempos grises y pandémicos. La excelente afluencia que mostró la sala, sería solo el primer indicativo de la gran noche que viviríamos en tierras inglesas.

Brujas puntuales

El acceso al recinto, por desgracia, no se habilito con la velocidad que hubiese sido deseable, por lo que entramos con media hora de retraso. La actuación de Burning Witches, sin embargo, se desarrolló con absoluta puntualidad por lo que solo llegamos a ver un tema de las suizas y de milagro. Pudimos apreciar como remataron su comparecencia con su tema homónimo y una gran ovación por parte del respetable.

El ocaso innecesario

Si antes mencionábamos la pobre estampa que algunas viejas estrellas del rock dan a día de hoy, enseguida podríamos constatarlo en vivo y en directo, con el señor Paul Di´Anno y su triste propuesta escénica. Una verdadera parodia que no merece estar abriendo para KK´s Priest y que no pasa de ser una verbena lamentable.

Abrió sin embargo con un sorprendente buen estado vocal, que lamentablemente duraría lo mismo que un caramelo a la puerta de un colegio. Sonaría dignamente “Wrathchild” y ya cuando le toco el turno a “Purgatory”, la garganta de Di´Anno dijo basta. A partir de ahí, se sucederían los cortes de Maiden sin pena ni gloria, cantados de cualquier manera, por parte de alguien que hace demasiado tiempo que debió dejar de arrastrar su legado.

Paul Di’ Anno (Foto: Unai Endemaño)

Entre medias de la comparecencia, un “Transylvania” para que el prota cogiese aire, un “Phantom Of The Opera” aplaudido entre la gente y para finalizar, sin poder levantarse de su silla de ruedas, un “Running Free” que sonó verdaderamente absurdo cantado por una persona que no puede dar ni medio paso. Se hace verdaderamente doloroso ver a alguien en semejante estado, seguir dándole patadas a algo que merece el mayor de los respetos.

Paul Di’ Anno (Foto: Unai Endemaño)

KK Downing: El ultimo Boy Scout

Después de la triste estampa que nos dejo el primer cantante de Maiden en las retinas, volvimos a recuperar la fe junto al señor Downing y los suyos. El tono descendente que había tomado la velada, rápidamente dio un giro de ciento ochenta grados, una vez la intro de KK´s Priest fuese lanzada sobre el O2 Academy.

Una suerte de monje presentando a cada miembro de la banda, dejando para el final al prota absoluto, daría paso a un “Hellfire Thunderbolt” verdaderamente atronador. Sonido perfecto y Ripper como maestro de ceremonias, tomando el centro del escenario, nos recibirían a la descarga metálica definitiva. Una en la que podríamos disfrutar con temazos de esta década y rememorar algunos de los mayores himnos de la historia del Heavy Metal.