Joe Satriani exhibe su virtuosismo en Bilbao

Joe Satriani cerró ayer en Bilbao la presentación en vivo en los escenarios estatales de su último álbum de estudio “The Elephants Of Mars” con una nueva exhibición de técnica, carisma y virtuosismo ante más de un millar de entusiastas del guitarrista neoyorquino.

Se presentaba el neoyorquino en la sala Santana 27 tras dos aforos completos consecutivos en Barcelona y Madrid como última parada en España de la gira europea “Earth Tour”. Tras sufrir varios aplazamientos desde su primigenio anuncio allá por el 2020, el tour que tenía su pistoletazo de salida el pasado 1 de abril en Oslo y tendrá su colofón hoy mismo en Burdeos, nos dejó a un Satriani en un estado de forma envidiable teniendo en cuenta que se encuentra a punto de cumplir 67 años.

Un alien inmune al paso del tiempo

Armado con un arsenal de guitarras, sus características gafas negras a juego con su atuendo y una formación de auténtico lujo como son Bryan Beller al bajo, al que pronto veremos por estos lares con The Aristocrats junto a otro mago de las seis cuerdas como Guthrie Govan, Kenny Aronoff a la batería y Rai Thistlethwayte a los teclados, tomaba posesión del amplio escenario de la Santana con puntualidad británica y una audiencia completamente receptiva al disfrute de una nueva demostración del maestro de maestros.

Joe Satriani (Foto: Nacho García)

Se esperaba con mucha expectación su retorno a Bilbao tras su anterior paso allá por el 2018 junto a John Petrucci y Uli Jon Roth como parte de los shows G3 que gran parte de sus incondicionales desean vuelva a recuperar pronto. Entre el público sin perder detalle se encontraban músicos como Pedro J. Monge de Vhäldemar, Mikel Lazkano de Leize y Pedro Hermosilla de Flyin’ Freak.

Joe Satriani (Foto: Nacho García)

En lo meramente musical abrió el concierto “Nineteen Eighty” y todo fue sobre ruedas para un concierto en imparable línea ascendente, tanto en intensidad como en conexión con la audiencia. Si bien la gran acogida que recibió el arranque de un show basado en sus últimos trabajos discográficos , temas como “Ice 9”, “One Big Rush” o “Flying In A Blue Dream” sobresalieron en el repertorio gracias a su imperativo estatus de clásicos.

Un sonido perfecto, de lo mejor que ha ofrecido la sala en mucho tiempo, unido a la perfección instrumental de este incontestable genio de las seis cuerdas, hacen que asistir a un concierto de Joe Satriani se convierta en toda una experiencia inolvidable. As en la manga y apuesta ganadora para cerrar la primera parte del espectáculo, “Summer Song” consigue llevar en volandas al intermedio a una audiencia que coreó cada nota del himno a viva voz en uno de los momentos top de la noche. Setenta y cinco minutos de éxtasis volando en un sueño azul.

Joe Satriani y su banda no bajan el listón

Una pausa de veinte minutos para abordar la segunda parte de un show en el que nuestro virtuoso protagonista cedería parte de su incontestable protagonismo al batería Kenny Aronoff, encargado de inaugurar el set con un extenso y vistoso solo de batería. No sería ese el único momento en dar un paso atrás para reconocer la labor de sus compañeros de tablas, así Rai Thistlethwayte dispondría también de varios minutos para demostrar su buen hacer a los teclados, gran aportación la suya también en los momentos en que dejaba de lado las teclas para hacerse cargo de la guitarra rítmica.

Joe Satriani (Foto: Nacho García)

Curiosamente el bajista Bryan Beller no dispondría de ese espacio de reconocimiento individual, su gran labor durante todo el show refrendó su magnífico desempeño a las cuatro cuerdas y habló por sí sola de su extraordinario nivel instrumental. Al igual que en la primera parte el repertorio navegaría por temas de nuevo cuño como “Shapeshifting”, “ Teardrops” o “Energy” con clásicos “Cool #9” o una “If I Could Fly” dedicada por Satriani a los asistentes.

Joe Satriani (Foto: Nacho García)

Un detalle a comentar en este momento fue el desvanecimiento por un golpe de calor de un espectador alojado en las primeras filas, el día había sido caluroso en Bilbao y la sala repleta lo sufría, afortunadamente la rápida intervención de la unidad sanitaria y la seguridad de la sala dejó el incidente en mera anécdota ya que minutos más tarde y en una posición más desahogada el desafortunado protagonista pudo continuar disfrutando del show. De nuevo la traca final del set serían bazas seguras “Always With Me, Always With You” pone los pelos de punta coreada por la abarrotada sala y “Satch Boogie” echa un espectacular cierre a la segunda parte del show.

Joe Satriani (Foto: Nacho García)

Breve despedida para abordar un fin de fiesta que inaugura “Crow Chant”, el tema más interactivo en la discografía del icónico guitarrista. Con Rai Thistlethwayte de director como si de un orfeón se tratara, las mil gargantas de la Santana coreaban la canción, nadie quiere que llegue el final y eso que nos acercábamos a las tres horas de deleite sonoro. Parco en palabras toda la velada Satriani mostró su agradecimiento a través de la música, varios gestos al aire y un cierre para el recuerdo con “Surfing With The Alien” donde volvía a regalar su virtuosismo mientras banda y audiencia vuelven a comulgar juntas.

Joe Satriani (Foto: Nacho García)

Como único punto negativo de la velada la poca consideración de los responsables de management del maestro Satriani con los compañeros en la labor gráfica, sin posibilidad de acceso a una zona delimitada para realizar su labor en las mejores condiciones, siendo obligados a realizar su trabajo en un lateral del escenario entre el público general. El viaje estelar del marciano alienígena despegaba de Bilbao rumbo a la conquista de nuevos destinos dejando tras de sí algunos guitarristas temporalmente frustrados tras magna exhibición, muchos maravillados y todos satisfechos de disfrutar de uno de los más grandes talentos en la historia de la guitarra eléctrica.