Como cada año el Azkena ofrece el cartel más apetitoso y variado en la Península. Bandas que difícilmente recalan por estas tierras desembarcan dentro del marco de un festival coqueto y atrayente. Tres jornadas de fiesta del rock con todas las ramas estilísticas mayoritarias: rockabilly, pop, folk, heavy metal, punk… Este año el cartel era de ensueño y la única mala noticia fue la cancelación de Danzig. Pero no empañó el resultado final. Esta décima edición ha sido, sin ningún tipo de dudas, una de las mejores de su larga trayectoria, y Vitoria ha vuelto a volcarse en un festival que es palpable en todos los rincones de la ciudad. Se vuelve a demostrar, como cada año, que el Azkena es el mejor festival hispano.

Tras las más de cinco horas de asfalto, llegamos al recinto que curiosamente presentaba una estampa muy diferente a las que suelen ser los jueves azkeneros. Nada de día de transición o de toma de contacto, el cartel del jueves era de ensueño. Era el día que el heavy metal dominaba y mucha gente viajó para ver esa única jornada

BLACK COUNTRY COMMUNION 7/10 (Jordi Zelig)

Siempre es un placer absoluto ver al bueno de Glenn Hughes sobre escena. Sus adicciones y vicios son ya algo que ha quedado en el olvido y capea bien los directos bien escudado por un Joe Bonamassa muy acertado y competente. Nos anunció Glenn que era el primer concierto de la gira europea, y algo se notó. La banda cumplía, pero las estrellas que la conforman parece que estén cada uno en su mundo. La cosa funciona por su presencia y carisma, pero los temas quedaron algo deslucidos por la temprana hora y las circunstancias. El show fue excesivamente corto y Hughes no estuvo tan deslumbrante como en sus shows en solitario. “Black Country”, “One Last Soul”, “Save Me”… Me faltó la version de “Medusa” de Trapeze y el tema de Bonamassa en solitario, pero tampoco nos podemos quejar. Para el recuerdo queda ese final con “Man in the Middle” y sobretodo por ese “Burn”. Van a hacer grandes cosas juntos, pero lo ofrecido en Gastéis queda muy lejos de lo que pueden llegar a dar de si.

THE CULT 7/10 (Jordi Zelig)

Profesionales y cumplidores estuvieron The Cult, pero poco más. Ian Astbury presentaba un físico dejado y desaliñado, muy alejado de esa elegancia de antaño. Afortunadamente la banda cumplió y el sonido nos dejó disfrutar de ese estilo post punk cercano al gótico con toques heavies. La clave de The Cult, el haber conseguido ese sonido tan propio y característico. Abrieron por todo lo alto: “Fire Woman” para continuar con la preciosa “Rain”. Incomprensiblemente Astbury empezó a lanzar una y otra vez la frase  chorra de ”señor piso”. Deconocemos esta broma intensa que tanto le gustó, pero estuvo toda la velada con el dichoso “señor piso”. Afortunadamente cuandoi atacaban los temas sonaban himnos de la talla de “Sweet Soul Sister” o “Rise”. Empezaron bien, tuvieron un bajón, y repuntaron al final. A destacar esa perla como es “Dirty Little Rock Star”, “Horse Nation” y la traca final con “She Sells Sanctuary” y “Love Removal Machine”. Terminaron antes de lo previsto, pero contentaron a la mucha gente que allí se agolpaba. Junto con Ozzy, ese sería el concierto más masivo de la jornada inaugural. A destacar la labor del bajista rubio apoyando de maravilla los coros.

ROB ZOMBIE 8/10 (Jordi Zelig)

Uno de los grandes triunfadores del festival. A pesar de lo breve del concierto es innegable que Rob posee un carisma y una presencia escénica espectacular. Imágenes icónicas de terror flanqueaban el escenario y los sonidos industriales y terroríficos pronto nos atraparon. La labor de John 5 a la guitarratambién es más que digna de mención. “Superbeast” y “Living Dead Girl” calaron pronto entre la audiencia y los bailes de Rob levantaban hasta el más muerto. El recuerdo para White Zombie vino de la mano de “More Human than Human”, gran himno industrial. Lo que no gustó tanto fue la inclusión de solos de guitarra y batería que quedarían separados por la lenta “House of Thousand Corpses” y “Sick Bubble-Gum”. No hubo mucho más: el “Never Gonna Stop” y la inconmensurable “Dragula”, el gran momento de su actuación junto a “Thunder Kiss 65”.

OZZY OSBOURNE 7/10 (Jordi Zelig)

A pesar de que hubo muchas críticas, todas fundamentadas y ciertas, sobre el estado vocal de Tito Ozzy, hay que tener en cuenta que es un milagro y un privilegio poder ver al Madman sobre las tablas. Sus movimientos de asemejan al Sr. Burns de los Simpson y parecía que se hubiese tragado a Amy Winehouse, cierto, pero hay que destacar que Ozzy superó con creces a lo ofrecido en Zaragoza hace ya algunos años. La cosa empezó muy bien, y la banda cumplió de maravilla. Gus G acaparó miradas y convenció a todo el mundo. Los que criticaron su fichaje creo que ahora han quedado impresionados por su trabajo a las seis cuerdas. Tommy Clufetos también demostró su clase. Tras el “O Fortuna” de Carl Orff la banda la emprendió con las clásicas “I Dont Know” y “Suicide Solution”. Movimientos parcos por parte de un Ozzy que salió bastante concentrado.

La cosa prometía, pero en “Mr Crowley” ya vimos alguno de sus primeros gallos importantes. A pesar de todo la calidad de la banda y la ilusión por ver a Ozzy hizo que muchos estuviéramos en un nube. En la sensacional “Bark at the Moon” la voz de Ozzy definitivamente emigró y su garganta se quebró definitivamente. Ese gallo me dolió hasta mí. Qué le vamos a hacer, hasta entonces estábamos disfrutando de lo lindo y ahora le tocaba al madman hacer malabarismos para conseguir terminar de manera airosa. En lo personal me supo a gloria escuchar en directo el “Fairies Wear Boots” antes de que Ozzy apuñalara sin remedio “Shot in the Dark”.

Llegaron los solos pues, bastante más largos de lo esperado, pero necesarios obviamente para un Madman que nos pidió disculpas. La recta final incluyó “Iron Man” (si bien esta vez sonó a “hojalata Man”, un “Crazy Train” muy esperado y en el que Gus G. Estuvo pletórico, un “Mama Im Coming Home” para el olvido y el grande finale con “Paranoid”. Cuando los tonos eran más bajos Ozzy podía sobreponerse y sacarlo adelante, pero en ocasiones lo pasaba realmente mal. A pesar de que en la prensa le pusieron a parir y que resuenan términos como autoparodia o naufragio soy de los que se aferran a una madera flotante y disfruto con ello. Sigue siendo un privilegio ver a Ozzy y hay que aprovecharlo. Dentro de poco dudo que este muerdemurciélagos esté para estos trotes. Espero que no cancele Wacken…

KYUSS LIVES! 8,5/10 (Guillem Sort)

No era fácil la tarea de Kyuss esta noche, tocar después de los conciertazos vividos durante la noche y hacerlo de madrugada, con un público pletórico y cansado podía jugar en su contra. A sabiendas de que serian juzgados por muchos después de su reunión en 2010 y con la sombra de un Josh Homme, que actuaba al dia siguiente, los Kyuss Lives! salieron a por todas. Entraron con “Spaceship Landing” y “Gardenia”, sonaban apabullantes, potentes, un sonido propio y que nos devolvió a todos a la década de los 90. Siguieron algunos grandes temas como “Odyssey”, “Supa Scoopa and Mighty Scoop” y como no podía ser de otra forma dejaron para el bis las inconmensurables “Molten Universe” y “Green Machine”. Así acabamos la primera jornada de un festival que se antojaba perfecto, los Kyuss Lives! dieron esa traca final que a nivel de sonido fue uno de los conciertos del festival, con permiso de Thin Lizzy.

Jordi Zelig Tàrrega - Guillem Sort / Fotos: Sergi Ramos

Promotor:Last Tour International

Asistentes:19000

Día:23/06/2011

Sala:Mendizabala

Ciudad:Vitoria-Gasteiz

Teloneros:OZZY-THE CULT-ROB ZOMBIE-BLACK COUNTRY COMMUNION-KYUSS LIVES!

Puntuación:8