Avatar: Enanos, tragasables y fans rinden pleitesía al rey en Barcelona

El momento de Avatar es espectacular ofreciendo un show global que va más allá de su actuación. Escenario, publicidad del rey en los entreactos, una feria con tómbola en el merchandising y el pulular de enanos, tragasables y exorcistas. Ya tienen el concepto y el sonido, poseen los temas y un directo demoledor, así que sólo les toca triunfar.

Mi relación con Avatar está llena de altibajos… Adoré su homónimo disco cuando eran una banda de sonido goteborg al uso, pero me defraudaron enormemente en directo compartiendo cartel con Hardcore Superstar. “Black Waltz” para mi fue un experimento fallido, pero fue entonces cuando ya tenían el concepto y la dirección musical. “Feathers and Flesh” es raro, con muy buenos momentos, pero con “Avatar Country” vuelvo a creer en ellos, y más después del concierto de ayer. Definitivamente esta gente va a por todas y los elementos shock rock les lucen de maravilla; pero todo esto no sería nada si no estuviera respaldado por un gran directo y unos grandes temas.

Me perdí a Old Kerry McKee pero disfruté como un enano (nunca mejor dicho), con el show de variedades de Hellzapoppin, retomando el show freak de Jim Rose Circus. Si creías que el circo de freaks que inmortalizó Tod Browning en la famosa película había muerto, que sepas que a día de hoy aún existe. Avatar han dado a su gira un sabor de circo decadente incluyendo al mejor telonero posible para su concepto. Tragasables, enanos, gente sin extremidades inferiores, hombres andróginos y buen humor acompañado por música rock de fondo. Todo un espectáculo que casa de maravilla con lo que se han convertido Avatar y que arrancó aplausos y “ooohs” de asombro y de asco. No tienen el glamour de Jim Rose ni es tan espectacular pero su originalidad es asombrosa.

Avatar (Foto: Sergi Ramos)

Bienvenidos al país de Avatar

La ya clásica intro de “Glory to our King” bajó el telón y nos mostró a “Kungen” Jarlsby en su trono empuñando una guitarra. Reverencias para el rey hasta que se plantó de rodillas Johannes Eckerström y empezó a cantar “Legend of the King”. Excepcionalmente maqueados y la sala sonando a gloria con coros (¡reales!) por parte de Örhström. Todo el grupo aporta al espectáculo y a nivel instrumental aplastan. Mejoran ampliamente lo ofrecido en disco y hasta los temas de “Black Waltz” encandilaron como, “Let It Burn” o “Paint Me Red”. Estuvieron simpáticos, comunicativos y demostrando un dominio absoluto de la expresión facial en los gags sobre el rey. “King’s Harvest” les pone de lleno en el metal alternativo pero con esa base death melódico de la escuela sueca que tanto luce, especialmente en los solos de guitarra doblados.

Avatar (Foto: Sergi Ramos)

“Bloody Angel” sonó como una apisonadora con esos dejes industriales y la teatral puesta en escena del grupo. Impactantes y contundentes atacaron el riff de “For the Swarm” acercándose al mejor Marilyn Manson con toques esquizoides. Es genial ver que todo un John Alfredsson a la batería se integra perfectamente en el concepto del grupo y luce un nivel técnico soberbio. Se nota los muchos años que llevan juntos y que disfrutan con lo conseguido. Johannes nos preguntó que cuántos les vimos en sus diferentes venidas a España, y la verdad es que han sido muchas. Todo ello para presentar “The King Wants You”, otra de las joyas de su nueva obra y que funcionó como era de esperar. En este disco el balance entre contundencia y melodía es excelente. Incluyeron a un roadie dándole a un cencerro, algo que ya hemos visto a The Hives hacerlo.

El circo vino con la cachonda “Puppet Show” en la que la feria cobra vida, consiguiendo uno de los mejores momentos de la velada. Luego se lanzarían a la balada “Tower” pero fue en “The Eagle Has Landed” cuando la sala se volvió loca del todo. Ese single perfecto del “Feathers and Flesh” que define bastante su sonido. Algo que personalmente me encantó fue el hecho de mantener un tema de sus dos primeros discos. Realmente ves la evolución en “War Song”, primeriza, sucia y ultraveloz. Otra cosa es “Reload” de “Avatar”, que sigue sonando a gloria, pero quizá ya había muchas y muy buenas bandas en ese estilo y tocaba hacer algo diferente. Siguieron con “Raven Wine” y otra de las favoritas del público: “Smells Like a Freakshow” con partes cantadas por el guitarra Tim Örhström.

Gran momenot con “Statue of the King”, uno de esos himnos que les va a acompañar siempre con Johannes luciendo registros y el resto de grupo tirando de técnica y feeling en los cambios de ritmo. Ya terminando la descarga lucieron ese country del demonio en “The King Welcomes You to Avatar Country”, con ese deje a AC/DC en el inicio. Gran final que se elevó con el que es su clásico más celebrado: “Hail the Apocalypse” en un gran derroche de decibelios y agresividad.

Avatar (Foto: Sergi Ramos)

El momento de Avatar es espectacular ofreciendo un show global que va más allá de su actuación. Escenario, publicidad del rey en los entreactos, una feria con tómbola en el merchandising y el pulular de enanos, tragasables y un McKee que con ese gorro y con los focos parecía el exorcista. Ya tienen el concepto y el sonido, poseen los temas y un directo demoledor, así que sólo les toca triunfar. Pueden haber sido algo irregulares y extraños desde su gestación pero se nota que apuestan fuerte y son candidatos a ser una banda de grandes recintos.