As I Lay Dying se (re)insertan en el corazón del público de Madrid

Desde que As I Lay Dying se reunieran de nuevo en 2017 tras la salida de la cárcel de su líder, Tim Lambesis, la controversia ha estado sobre la mesa en cada uno de sus conciertos.

Sin ir más lejos, tras el revuelo que causó cancelación en el Resurrection Fest 2019. El hecho de tener delante a una persona -que para muchos es un ídolo- que ha cumplido condena por intento de asesinato no debe ser plato de buen gusto para muchos. Sobre esto ya elaboramos un artículo que puedes leer aquí. Centrándonos en el cartel, As I Lay Dying venían a La Riviera de Madrid a presentar su ñutimo trabajo de estdio: ‘Shaped By Fire’. Pero no lo harían solos, sino con la compañía de Chelsea Grin, Unearth y Fir For A King, dando forma a un show que les sería difícil de olvidar a los presentes que a punto estuvieron de llenar la famosa sala madrileña.

Fit For a King: Una calurosa bienvenida

Con puntualidad al estilo británico, Fit For A King saltaban al escenario de la Riviera para romper el hielo con “Backbreaker”. Este tema se encuentra dentro de su recién estrenado ‘Dark Skies’, álbum que vienen presentando en esta gira; por lo que sobra decir que es el que más peso tuvo en su setlist. Desde el minuto uno, la sala acogía un panorama bastante distinto al que acostumbramos a ver durante las actuaciones de los teloneros. Lejos de tocar ante un par de decenas de personas, la banda de Texas animó a un respetable que casi llenaba la pista por completo y que, además, corearon los temas de los americanos de principio a fin.

Fit For A King (Foto: Víctor Gallego)

Los pogos, animados por su vocalista, Ryan Kirby, se sucedieron durante los treinta minutos de show en temas como la potente “Shattered Glass”  o “When Everything Means Nothing”, de corte algo “melódico”. Fue una de las actuaciones donde más movimiento hubo, tanto es así que los propios miembros de la banda se unieron en consideradas ocasiones al crowdsurfing del público. Actitud y ejecución de sobresaliente para el cuarteto de Dallas en su segunda visita a la capital, donde seguro consiguieron recaudar más adeptos a su causa. “Tower of Pain” ponían punto y final a su actuación.

Continúa la tralla con Unearth

Siguiendo el ejemplo de sus compatriotas, Unearth, salieron a darlo todo. Hace apenas un par de meses que tuvimos al quinteto de Boston por nuestras tierras, concretamente en el Leyendas del Rock; pero esto no sirvió de precedente para que sus seguidores no enloquecieran con su actuación. Comenzaron su concierto con “Incinerate”, tema perteneciente a su último disco editado: ‘Extinction(s)’.

Unearth (Foto: Javier Bragado)

A diferencia de otras de sus actuaciones, en las que nos han visitado teloneando a grandes del thrash como Exodus y Testament, esta vez su estilo era afín al combo de bandas de metalcore presentes en el menú. Dicho esto, el combo encabezado por Trevor Phipps se metió al público en el bolsillo con la interpretación de cortes como  “My Will Be Done” o “This Lying World”.

Unearth (Foto: Víctor Gallego)

Si hay que sacar alguna pega al concierto de Unearth fue sin duda el sonido, que sonaba atronador y más elevado que el del resto de bandas. “Endless” y “The Great Dividers” marcaron el final de un show que se antojó especialmente corto a pesar de su gran intensidad.

Unearth (Foto: Javier Bragado)

Chelsea Grin: El plato más contundente

Contrastando con el estilo de sus compañeros de cartel, Chelsea Grin, marcaron la diferencia con el deathcore que define su estilo musical. Difirió también su sonido, que sorprendentemente mermó casi a la mitad, propiciando un cierto decaimiento en los asistentes.  Las primeras bombas en caer fueron “My Damnation” y “Cheyne Stokes”, dejando en tercer lugar a “Dead Rose” de su último disco: ‘Eternal Nightmare’, lanzado hace algo más de un año.

Chelsea Grin (Foto: Víctor Gallego)

Era la primera vez que se presentaban en nuestro país con su nuevo vocalista de guturales, Tom Barber, tras la salida de su cantante original Alex Koehler el año pasado. Quizá fue este el motivo por el cual la banda de Salt Lake City no consiguió calar como debería en el público. Otros de los temas  que dieron forma a su actuación fueron las nuevas “The Wolf”, “Across the Earth” y “Outliers”, que consiguieron algo más de movimiento en la pista. La media hora del cuarteto tocó a su fin con “Recreant” y “Hostage”.

La segunda oportunidad de As I Lay Dying

Minutos previos a la actuación de las estrellas de la noche, la pista era poco más que un cocedero de nervios. El cambio de backline se antojó especialmente corto, y es que, el telón que había sido colocado para ocultar la labor de los técnicos en el escenario, caía 10 minutos antes de lo previsto.

As I Lay Dying (Foto: Víctor Gallego)

Como era de esperar, la intro “Burn to Emerge” comenzaba a abrir boca mientras los cinco músicos que componen la banda tomaban posiciones.  “Blinded”, primer tema completo del recién salido del horno “Shaped By Fire”, desataba la locura en la pista con sus primeros acordes, sensación que fue in crescendo en los cortes que llegaron a continuación: “Through Struggle” y “Within Destruction”. Esta última, encuadrada en el álbum ‘An Ocean Between Us’ (2007) fue una de las más celebradas, y eso que el resto de temas se lo pusieron bastante complicado.

As I Lay Dying (Foto: Víctor Gallego)

La sorpresa llegaba para la interpretación de “Redefined”, donde el vocalista Tim Lambesis llamaba a colaborar al frontman de Fit For A King. Otro de los temas que no podía faltar en la lista era  “The Sound of Truth” al que seguía “Forsaken” y el corte que da título al álbum, y por consiguiente, a la gira entera “Shaped by Fire”.  Por si no había quedado claro durante la interpretación de los temas anteriores, el nuevo material de As I Lay Dying brilla por sí mismo, con más rabia y energía que sus anteriores trabajos, y deja entrever el gran futuro que tiene el grupo por labrarse.

Tras unos segundos de descanso llegaba “The Darkest Nights” cantada a dúo entre Lambesis y el bajista Josh Gilbert, uno de los tracks más melódicos de la noche (por muy irónico que suene el hecho de llamar melódico a una canción de metalcore). Aunque pronto tardarían en aparecer las revoluciones perdidas con “An Ocean Between Us”, “Gatekeeper” y por supuesto, “A Greater Foundation”. La recién nombrada forma parte del ‘Awakened’ último disco editado antes de que el mundo se detuviera para la agrupación californiana durante unos años por el encarcelamiento de Lambesis.

As I Lay Dying (Foto: Víctor Gallego)

El regreso a los escenarios ha servido para demostrar el buen estado de forma, no solo de su vocalista, capaz de llegar a las notas más agudas de “Parallels”. Si no de toda la banda, pues aparte del citado Josh Gilbert, los guitarristas Nick Hipa y Phil Sgrosso, y el batería Jordan Mancino forman un tándem incombustible sobre las tablas. Dicho esto apenas quedaba tiempo para más y “My Own Grave” y “94 Hours” daban carpetazo a la primera gran parte del show. Minutos más tarde la intro “Separation” introducía a “Nothing Left” y “Confined”, que pondrían el punto final definitivo a una noche de sobresaliente.

As I Lay Dying (Foto: Víctor Gallego)

Está claro que As I Lay Dying han resurgido de sus propias cenizas, más fuertes que nunca, recuperando el trono que nunca deberían de haber perdido. Puede que muchos sigan ejerciendo un gran juicio moral sobre Lambesis, pero al fin y al cabo lo que venimos juzgando aquí es su arte. La primera visita de la banda a Madrid fue todo un éxito, y el vocalista se mostró más que agradecido por la segunda oportunidad dada, prometiendo regresar pronto por nuestras tierras. Una cosa que queda de manifiesto, opiniones aparte, es que a eso se le llama progreso.