Apocalyptica: su show más épico en España gracias a Metallica

Podría decirse que Apocalyptica es una de esas bandas que frecuenta nuestro país atravesando distintos puntos en su recorrido. Tras su anterior gira junto a Épica en febrero del pasado año, los finlandeses nos visitaron de nuevo para presentarnos su última creación, que fue lanzada en junio de este año.

Las puertas de la sala La Riviera abrieron en torno a las siete de la tarde. El público comenzó a ocupar poco a poco la sala escogiendo el mejor sitio posible para ver a dos bandas de origen finlandés. Por un lado, los aclamados Apocalyptica, pero no sin antes calentar motores con su banda invitada, Arctis, quienes presentaron su primer trabajo con el mismo nombre, ‘Arctis’. Una banda emergente que, para empezar su carrera, tuvo una muy buena acogida por su respetable mostrando su particular estilo.

La gran espera llegó a su fin

A pesar de su visita a nuestro país el pasado febrero de 2023 junto a Epica, Apocalytica deleitaron con su nuevo álbum ‘Plays Metallica vol. 2’. Como diferencia respecto al show del año pasado, en esta ocasión no hubo artistas invitados para poner voz a las letras de sus temas salvo una sorpresa final. Comenzaron, como no podía ser de otra manera, con la primera canción de dicho álbum que dio nombre al homónimo de 1984 de Lars y compañía,  “Ride The Lightning”, tras una intro en la que sus fans comenzaban a perder la compostura y reflejaban el deseo de verles sobre las tablas.

Apocalyptica (Foto: Kaisla Virtanen)

Pronto comenzaron a interactuar con el público Eica Toppinem y Perttu Kivilaakso, donde Eica nos sorprendió con unas palabras en castellano y Perttu, en general, enfatizó la actuación desplazándose enérgicamente de un lado a otro y colocándose más cerca del foso de fotógrafos y del público bajando un pequeño escalón del propio escenario para mostrar su gran pasión.

Entrelazaron temas del nuevo álbum con aquellas covers de Metallica tras confesar su inspiración por parte de esta banda veterana, recordando aquellos tiempos de juventud, donde dieron comienzo a su trayectoria profesional y rememorando ese primer disco en honor a Metallica 28 años atrás. “Creeping Death”, «For Whom The Bell Tolls» y “Battery” fueron algunos de los primeros ejemplos de que los clásicos nunca mueren y que, siendo seguidor del género que sea, son reconocidas allá donde suenen y sería prácticamente un pecado no poder añadirle voz.

Apocalyptica (Foto: Kaisla Virtanen)

Fue conmovedor escuchar la letra de las covers cantadas por el público al son de unos potentes cellos que servían de contraste entre ambos estilos al igual que «The Call Of Ktulu» para la cual la banda contó en la composición de su último trabajo con la pista de bajo de Cliff Burton, al que quisieron homenajear con dicha canción. La presentación de “St. Anger” fue sobrecogedora debido al cuidado juego de luces, donde una cortina de luz verde se extendía desde el centro hacia los extremos, adornado además de un deslumbrante hilo de luces blancas en la base del escalón del escenario.

Tras una combinación de lo ya conocido y lo nuevo por conocer, aprovecharon una pausa para preguntar quiénes de los presentes les había visto en la década de los ’90 en los escenarios, dar las gracias nuevamente y, tras ello, hacer una transición a la presentación del siguiente tema, “The Four Horsemen”, con el que se trasladaron a los inicios de los cuatro jinetes y a su ‘Kill ‘Em All’. Y ahí no paró la velocidad, y es que acto seguido tocaron «Blackened» una de las más célebres entre «las rápidas» de Metallica que puso a todo el mundo a animar a los fineses.

Sinestesia de metal y emoción

La atmósfera creada fue una mezcla de varias sensaciones: por un lado, la gran profesionalidad con la que estos músicos tocaron este peculiar instrumento; la confesión de inspiración de una gran banda para dar un comienzo y mantener en su carrera musical; la pasión plasmada en cada nota, cada melodía y cada pieza musical desde hace algo más de dos décadas. Emociones que calaron hasta la medula a un respetable fiel y entregado a la escena que nos ofrecieron estos cellistas.

Entre tema y tema expresaron también su paso por distintos puntos del país, como fue hace unos días en Bilbao, pasando después por la capital uniendo con Barcelona y Portugal en los próximos días. Momento idóneo para comenzar la típica guerrilla de cuál es el mejor público, el más ruidoso, traduciéndose a menudo como el más fiel. Esto también lo hicieron en Barcelona, donde dijeron que habían estado mejor que Madrid tras un abucheo del público al ser nombrada la capital.

Apocalyptica (Foto: Kaisla Virtanen)

Indescriptible como dos estilos tan distintos pueden fundirse en una misma sala, en un mismo escenario, por seguidores tan diferentes, pero al mismo tiempo tan fieles y abiertos a nuevos horizontes. Cómo la música puede unir de forma tan poderosa e irremediable.

Algo que tampoco puede faltar en cada actuación es el momento de presentarse. De forma muy efusiva y divertida, Perttu presentó a cada integrante, incluyendo a Mikko Kaakkuriniemi como su nuevo batería (que tuvo un protagonismo especial en la sala Razzmatazz de Barcelona ya que es la ciudad donde vive y por ello le dejó el micrófono -algo que dijo que no haría nunca más entre risas-).

Apocalyptica (Foto: Kaisla Virtanen)

Sus compañeros no pudieron ocultar las risas frente a la espontaneidad de Perttu. Tras esta improvisación, prosiguieron con la mencionada cover en la que incluso ellos mismo pusieron voz dando paso a la última parte de la velada. Los asistentes sabían que pronto tocaría su fin, pero se aferraban a cada nota que flotaba en el ambiente y a cada minuto como si de un reloj de arena se tratase.

La recta final

No dieron por concluída la velada hasta la íntegra interpretación de piezas master, como son las sonadas “Master Of Puppets”, donde los asistentes parecían ser manejados por las manos de un poderoso ente musical y “Nothing Else Matters”, que fue posiblemente la canción más esperada y emotiva para su respetable, donde las pantallas de los teléfonos móviles inundaron la sala como un manto estrellado al son de su dulce melodía interpretada por los mismos.

Apocalyptica (Foto: Kaisla Virtanen)

Canciones como “Seek And Destroy”, entre otras, formaron alguno de los momentos más esperados por algunos de los presentes, donde la letra se distinguía entre los acordes de los cellos. Perttu, incansable de caldear la sala aún más, encadenó en medio del tema unos acordes para hacer la típica melodía de “oé, oé, oé”, algo que sus fans no tardaron en descifrar y prorrogar entre risas y aplausos.

El broche de oro lo puso, tras la típica falsa despedida, la pieza más especial del último trabajo de los fineses en honor a Metallica. «One» es ese corte que, tras una readaptación, ha contado además con la voz del propio James Hetfield a modo de narración y por eso hicieron que el frontman de los norteamericanos estuviera presente «a su manera».

Apocalyptica (Foto: Kaisla Virtanen)

Apocalyptica es una de esas pocas bandas que sabe jugar perfectamente con su técnica y delicadeza para cautivar a sus seguidores, ya que sus obras están cargadas de sentimiento. Sólo nos queda esperar para poder verles de nuevo y volver a disfrutar la hora y media que nos ofrecieron en un melancólico paraíso de metal interpretado por cellos.