CAVE IN + PELICAN

Por norma general los días “Lunes” no suelen animar a muchas  celebraciones
y mucho menos a organizar cualquier tipo de concierto. Esta teoría se invalida
cuando se trata de bandas internacionales que visitan Europa por un corto espacio
de tiempo y que deben ajustar al máximo su calendario de gira. Así que el primer
día de la semana puede convertirse espontáneamente en el día idóneo para acercarse
a una sala y disfrutar, como es el caso que nos ocupa, de bandas de la talla
de PELICAN o CAVE IN.

Todo lo que rodeaba a este concierto era de una u otra manera, ciertamente
curioso. Las bandas se mueven por terrenos prácticamente underground en nuestro
país y la promoción del evento había sido escasa. Sin embargo, el boca a boca
consiguió que nos plantásemos en la madrileña Gruta 77 sabiendo de antemano
que se colgaría el cartel de “no hay entradas”. Este hecho dejó a más de uno
en la puerta y fueron múltiples los requerimientos de entradas en los alrededores
de la zona de locales de ensayo. Y es que Gruta 77 no es más que eso, un cubículo
con capacidad de público limitada que ofrece las condiciones mínimas para la
celebración de un concierto. Pese a todo, el ambiente previo era muy llamativo
y facilitó la buena conexión banda-audiencia. Gente llegada de muchos sitios
de España, algún guiri de paso, residentes foráneos….nadie quiso perderse la
cita con las dos bandas americanas. Ya con la sala prácticamente llena saltaban
a escena la primera formación de la noche: PELICAN.

Debo reconocer que el mayor aliciente del concierto era esta banda de Chicago.
CAVE IN venían como cabezas de cartel, pero su apuesta quizá está muy mascada
y cada vez les resulta más difícil innovar en su música. No es el caso de los
cuatro “pelícanos” que abanderan una de las corrientes actuales más originales
y novedosas. Podíamos hablar de post-rock, sludge o drone-doom y no estaríamos
equivocados en ningún caso. PELICAN es esto y mucho más. Y todo ello contando
únicamente con los instrumentos habituales. Valga un recordatorio rápido, esto
es, guitarras, bajo y batería. Y aquí viene el hecho que llamará la atención
de muchos: PELICAN practica una música totalmente instrumental.  

La banda venía a presentar su trabajo ‘The Fire In Our Throats Will Beckon
The Thaw”, editado por un sello poco conocido por aquí, llamado Hydra Head.
Personalmente puedo decir que tanto éste, como el mini cd “March Into The Sea”
que le precedió, son auténticas joyas dignas de ser escuchadas en algún momento.
Otros muchos son seguidores acérrimos de “Australasia”, la plataforma de despegue
de la banda hacia un mayor nivel de reconocimiento. No están equivocados tampoco.
Y es que ya en 2003 la banda había plantado las bases sobre las que se levantan
ahora.

Con todo preparado y un público expectante saltaban al escenario PELICAN. Luz
tenue y ningún tipo de presentación dieron paso a “March Into The Sea”, tema
largo, potente y vibrante. Con un volumen altísimo y quizá algo descompensado
comparando guitarras y bajo con batería. La banda dejó claras sus credenciales,
practicando ese estilo tan característico cercano a grupos como GODFLESH, JESU,
RED SPAROWES o MOGWAI. Podríamos hablar de ciertas influencias de NEUROSIS o
ISIS, pero es más aventurado  al no contar con partes vocales.

PELICAN se dan un aire muy europeo en cuanto a estilo y actitud en el escenario.
Algo fríos pero apabullantes. Sin ningún tipo de pausa dieron paso a “Autumn
Into Summer”, con un Bryan Herweg comandando la apisonadora sonora. Caras de
concentración en toda la banda y una actitud estática fueron las notas dominantes
de su actuación. Y creo que no hay que pedirles nada más, porque su música lo
dice todo. “Night End Day “, “Sirius” y “Last Day Of Winter” completaron el
set list de la noche. Fue curioso comprobar cómo uno de sus guitarristas hacía
uso de un arco de violín para exprimir al máximo los recursos de su guitarra.
El público disfrutó con cada uno de los temas y no quiso dejar marchar a la
banda tan fácilmente. Ante los aplausos y gritos de los allí presentes, el cuarteto
volvió al escenario e interpretó un nuevo tema que todavía no tiene ni título.
Creo que esto no importó a nadie y todo el mundo se dedicó a disfrutar con unos
minutos más de PELICAN antes de que se despidiesen, y ésta vez sí, diesen la
gracias repetidas veces ante el trato recibido. Creo que no se esperaban una
respuesta tan calurosa como la que ofreció la parroquia madrileña y espero que
ésto sirva para poder verles por aquí pronto. Próximamente estarán acompañando
a OPETH por parte de su gira americana, lo cual es indicador de que no sería
tan descabellado verles junto a una banda de estas características.

Llegaba el turno de los cabezas de cartel de la noche. Desde Boston llegaban
CAVE IN, una banda que por años tiene más trayectoria que PELICAN, lo que les
llevó a ocupar la privilegiada posición en el cartel. El público estuvo repartido
entre ambas bandas, y CAVE IN atrajeron a muchos seguidores del hardcore. Personalmente
tuve la posibilidad de conocer a la banda gracias a una publicación local de
Boston que les entrevistaba allá por el año 1998. Casualmente me encontraba
allí en aquella época y pude empaparme de muchas bandas de Massachussets, como
estos CAVE IN o REVEILLE. Predominaba por aquella época el Hardcore y los sonidos
rocosos a lo NEUROSIS y muchas de las bandas practicaban un estilo con muchos
matices extremos. CAVE IN sin embargo se salían de la norma y como ellos mismos
se definían, su sonido iba más allá del metal, de lo progresivo o del post-hardcore.
Simplemente era rock.

Con una estética muy sureña y luciendo una camiseta de ANTHRAX saltaba Stephen
Brodsky acompañado de los suyos para ofrecer un show lleno de altibajos, con
partes más metálicas y otras más rockeras llegando a rozar la frontera del pop-rock.
Como mencionaba, la banda ya hace tiempo que dejó de fijarse en las fuentes
del metalcore y del hardcore para centrarse en un estilo más experimental y
retorcido.

Abrían la velada con “Off to ruin” y ya desde el primer momento su front-man
trataba de animar al personal dedicando algunas palabras, y lo mejor de todo,
unos cómicos bailes que espero fueran premeditados. Durante esta gira han venido
incluyendo prácticamente los mismos temas y Madrid no fue una excepción. Destacaron
entre ellos cortes como “Dark Driving”, “The World Is In Your Way“, “Shapeshifter“,
“Moral”, “Eclipse”, “Ataraxia”, “Screaming In Your Sleep”, “Dead Already” ,“Big
Riff”o “Trepanning”. Era interesante ver al cambio radical de actitud tanto
en público como en banda cuando llegaba el turno de un tema de su etapa más
harcdcore. Se montaban pogos en el foso, algún que otro stage surfing y sobre
el escenario la cara de Caleb Scofield al bajo escupiendo los rudos alaridos
lo decían todo.

Sin embargo, tras la tempestad llegaba la calma y creo que este factor cortaba
bastante el ritmo de la actuación. Tras un par de bises y habiendo repasado
temas de sus álbumes “Antenna”, “Tides of Tomorrow” o “Jupiter” pusieron el
punto y final a la actuación, no sin antes ver cómo desde el fondo del escenario
aparecía Bryan de PELICAN para, sin pensárselo dos veces, saltar sobre el público,
cosa que provocó la sonrisa de muchos.

CAVE IN por su parte agradecieron el gran interés de sus seguidores que les
había llevado a conseguir el primer sold-out de la gira.  De esta manera se
despidieron hasta su próxima visita.

En definitiva, un gran concierto en el que sobresalieron sobre todo PELICAN.
Esperemos que en próximas actuaciones puedan contar con una sala de mayor capacidad
y medios. De momento, sólo podemos deleitarnos con el recuerdo de su gran actuación
en aquel Lunes de Febrero.