Blaze Bayley tira de simpatía en Polinyà
Ha pasado mucho tiempo y el exMaiden ha cambiado mucho. Hasta el punto de que había deambulado entre la gente y muchos no lo reconocieron. Físicamente está en la liga de Paul DiAnno y lejos queda esa imagen icónica del cantante de Maiden, que, en solitario, tocaba en festivales importantes y lo daba todo encaramándose a lo alto de los escenarios escalando hasta las torres de luces.
Nunca hubiese llegado a unir dos conceptos tan distantes como Blaze Bayley y Polinyà (pueblo catalán cercano a Barcelona) pero sorpresas te da la vida: Blaze tocaba en… ¡Polinyà, y gratis!! Como ya hace tiempo pasa en Ripollet, se aprovechan las fiestas del pueblo para dar cabida a otros estilos musicales, un ejemplo a seguir y a perpetuar. Completaban en cartel Souldealer, Betty Ford (¿referencia a la clínica de desintoxicación de famosos?) y los siempre notables Tabü. Todo un Rockfest que desgraciadamente no llevó a conseguir una gran asistencia. Pero os aseguró que valió la pena.
Entre un mar de luces, tiendas de feria y familias uno avanzó a ciegas hasta encontrar el emplazamiento. Necesité ayuda incluso. En un campo de futbol sala se había levantado un funcional escenario y había una única barra que se quedó sin cerveza en el concierto de Blaze. Una lástima pues eran precios muy populares y parte del caché seguro que se pagaría con lo facturado en barra. Llegué cuando Tabü estaban desgranando su último “Destino”. Su hard rock hispano puramente 80 funcionó bien aún no gozando de un sonido excesivamente pulcro. Sorprendieron con la versión en castellano de “Anytime, Anywhere” de Gotthard. Recuperaron “Dame” de su anterior obra y destacaron “Escúchame”, “Nada” y “Sueños”. Quizá no fue el mejor momento para atacar la bonita balada “Contigo estaré”. David y los chicos estuvieron muy atentos con toda la gente que nos acercamos a charlar con ellos. No fue su mejor concierto, pero ideal para ver cómo funciona el nuevo material en directo.
Le tocaba el turno al bueno de Blaze. Ha pasado mucho tiempo y el exMaiden ha cambiado mucho. Hasta el punto de que había deambulado entre la gente y muchos no lo reconocieron. Físicamente está en la liga de Paul DiAnno y lejos queda esa imagen icónica del cantante de Maiden, que después, en solitario, tocaba en festivales importantes y lo daba todo encaramándose a lo alto de los escenarios escalando hasta las torres de luces. El arranque del concierto fue titubeante y la sensación de decepción entre la gente era palpable. Los tres primeros temas fueron realmente flojos en ejecución, en sonido y en entrega. “Born as a Stranger”, “The Brew” y “The Launch” anticipaban un naufragio, pero afortunadamente la cosa cambió. Blaze sacó más voz y pronto vimos que el grupo era técnicamente muy competente. Especialmente a partir de “Futureal”, la primera de Iron Maiden.
Blaze tiró de simpatía, muecas y buenrollismo. Ha perdido mucha voz pero sigue siendo un tipo especial y querido. “Virus” fue todo un regalo y obviamente “The Clansman” y la final “Man on the Edge” llegarían a convencer ampliamente. Sorprendió que nos regalara un “Como estáis amigos” que sustituyó al “Fear of the Dark” con el que suele habitualmente cerrar la banda. Es mejor limitarse a tocar el material que ha desechado la doncella. Personalmente destaco la inclusión de “The Ghost in the Machine” y “Silicon Messiah”, dos temas que en su momento llegaron a sonar bastante como singles. El concierto fue de hora y media y hubo un par de solos realmente originales y entretenidos. El baterista salió de paseo, baquetas en mano, arremetiendo contra vallas, tarima y suelo. El guitarra y bajista se marcaron un solo en el que rifeaban con una mano y tocaban los acordes del mástil ajeno. Algo que siempre funciona y resulta bastante espectacular. Mientras tanto Blaze hizo un poco de mimo llevándose las manos a la cabeza y cogiendo herrajes de batería amenazando con golpear a sus compañeros para que parasen. Algo muy a lo Paul DiAnno… “(Tough as) Steel” fue la única referencia a Wolfsbane.
Blaze bajó y estuvo abierto a todo el mundo. Pudimos charlar con él y hasta le ayudamos a abrir una botella de vino a la que tuvimos que hundirle el corcho. Llegó a pedir una copa de cristal que nunca llegó. Cero glamour… Buena velada que esperemos que tenga perpetuidad en el tiempo y llegue a ser una fecha tan ineludible como el Ripollet Rock.
Disculpad las fotos pues no llevamos a ningún fotógrafo profesional. ¡Gracias Clara!
Promotor:Ajuntament de Polinyà
Día:2015-07-10
Hora:19:00
Sala:Polinyà
Ciudad:Polinyà
Teloneros:Betty Ford Souldealer Tabü
Puntuación:7
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