BELPHEGOR + VREID + EMANCER + AVGRUNN

No ha resultado tarea sencilla poder ver a BELPHEGOR por estas tierras. Si la memoria no me falla, hasta tres giras a lo largo de los últimos dos años que incluían en su cartel a los austríacos llegaron a cancelarse. Ya tocaba mejor suerte, y esta vez acompañados por los sensacionales VREID, aquello no tenía que salir mal.

Abriendo la velada teníamos a los prometedores death metaleros barceloneses de AVGRUNN, una agrupación que se está ganando una gran reputación en la ciudad a base de dinamitar las salas con potentes conciertos y puro death metal old school. Lamentablemente para con mis intereses personales, la velada esa noche se iniciaría incluso antes de lo que estaba anunciado, unos 20 minutos quizás, en aras de poder cumplir de forma coherente con los horarios previstos. Todo ello propició que a pesar de mi empeño tan solo pudiera disfrutar de la recta final del concierto, pese a que me consta que la banda ofreció una potente actuación y un cuidado set list en el que tuvo cabida incluso una versión de DYING FETUS. Sin embargo, algunos problemas técnicos deslucieron en cierta medida el show, no pudiendo brillar tanto como acostumbran habitualmente. Esto se vio reflejado en el cabreo de su cantante Dani (que en esta ocasión no salió embadurnado en sangre) cuando dejó de funcionarle el micrófono. Sonido bastante correcto y un serio aviso para los presentes que desconocían la existencia de la banda: si tenéis la ocasión de verlos en un concierto propio no desaprovechéis la oportunidad, os harán vibrar a base de caña.

En contra de lo que anunciaban las primeras versiones del cartel, y como era lógico, los desconocidos EMANCER serían los siguiente en salir a escena. Me gustó su fusión y enfoque musical, si bien es cierto que denotaban cierta falta de empaque a nivel global. Lo suyo es un black/death metal bajo en calorías y combinado con tendencias más afines al gothic metal. No en vano, cuentan con una teclista femenina que en ciertos momentos aporta su voz a las composiciones, dotando al conjunto de cierta versatilidad. En cierto modo podrían recordar a los extintos ORPHANAGE en una vertiente algo más experimental. Lo que hicieron, lo hicieron bien, pero su propuesta musical era la que menos pegaba con el resto del cartel y este extremo repercutió en el frío recibimiento que les brindó la concurrencia.

Muchas ganas de ver a VREID, el grupo que más me interesaba de la velada. Con un estilo propio de black»n»roll bastante agresivo y con una herencia del sonido WINDIR de la que, para nuestra fortuna, no se han acabado de despojar, su propuesta se nos revela original y brillante disco tras disco, habiendo alcanzado además una prospección europea mayor que la alcanzaran en su día con la magistral banda liderada por el maltrecho Valfar, en gran parte gracias a que han sabido colarse en el circuito europeo de giras y festivales. La banda actuó ante una ya nutrida concurrencia y fueron los primeros en hacer vibrar al personal, contando también con un gran sonido que afortunadamente hizo justicia a la calidad de la banda y los temas. No fue un set muy extenso y para más inri se nos pasó volando, pero para el recuerdo quedaron la inicial "Alarm", con la que suelen iniciar sus shows, la rápida "I Krig" o la contundente "Speak Goddamnit". La banda no estuvo especialmente comunicativa con el público, como noruegos que son, aunque sí se mostraron mucho más receptivos que sus compatriotas BELPHEGOR, que parecen tener los humos un poco más subidos. Para el final se guardaron la primera parte del tema "Blücher" y, cómo no, finalizaron el set con ese clasicazo contemporáneo ultrarockero que es "Pitch Black", todo un disparo en el entrecejo. Sobresalientes, como siempre.

La única vez que había visto a BELPHEGOR en España fue en el último Atarfe Vega Rock y fue una de las actuaciones más desastrosas que se recuerdan en este país, con el sonido saliendo tan sólo por los monitores de escenario, la PA apagada, las guitarras inexistentes y 20 minutos de actuación. Algún día publicaremos la crónica inédita de aquél último Atarfe Vega Rock, que sigue guardada a buen recaudo sin ver la luz por misteriosas razones. Menos mal que la banda ya había tenido la oportunidad de demostrarnos en diversos festivales europeos de qué madera están hechos, por lo cual esta noche tenían todo a favor para imprimir su sello en la piel de toro. Así pues, se encargaron de arrasar con todo en la hora de actuación de lo que gozaron, no dejando títere con cabeza y llevándose por delante a cristianos, hipócritas, babosos, mentirosos y demás adalides de la ignorancia y lo absurdo a ritmo de cortes tan "sutiles" como "Belphegor – Hell»s Ambassador", "Stigma Diabolicum" o "Veneratio Diaboli – I Am Sin". El siempre impactante frontman Helmuth volvió a salir descamisado, ensangrentado, desafiante y haciendo gala de esa voz ultragrave también cuando habla entre tema y tema. La naturaleza de su música siempre me hizo pensar en ellos como una versión más death metal de los suecos DARK FUNERAL, pero lo cierto es que BELPHEGOR han sabido labrarse en estos últimos años una fama y una línea estilística visual y musical más allá de toda comparación, de la mano de esa agresividad de corte tosco y destructivo. Como punto negativo de la actuación podríamos destacar la inclusión un tanto aleatoria de intros, outros e intermezzos entre temas, que sonaban de forma aislada y bastante gratuita, sin realzar el tema que venía a continuación ni engalanar el que acababa de terminar, rompiendo bastante el ritmo del concierto y dejándonos una sensación un tanto extraña, dado que los músicos, lejos de demostrar una actitud altiva, ritual o solemne, en esos momentos aprovechaban para charlar entre ellos, despojando a dichos pasajes de cualquier razón de ser. Más o menos una hora sobre el escenario estuvieron, interpretando en su recta final la breve pero intensa "Lucifer Incestus", posiblemente uno de sus temas más conocidos por estos lares (en gran parte gracias a su blasfemo videoclip, que en su día sacudió a bastantes mentes bienpensantes). A continuación sonaría "Justine: Soaked In Blood", para despedirse y volver con "Swarm of Rats" a modo de encore.

Concierto más que correcto de BELPHEGOR que de esta forma se quitan la espina clavada que tenían con sus recientes venidas fallidas a la Península. Y, por supuesto, gran descarga de VREID que se lucieron una vez más. Esperemos que sigan cayendo por aquí giras de dicho calibre, ya que la sala, si bien lejos de estar llena, sí que mostró una entrada más que decente.

Texto y Fotos: Penumbra.