AZKENA ROCK (parte 2)
SÁBADO 16 CONCIERTOS DE ENSUEÑO
Otra vez pasamos otra noche en blanco y otra vez había concierto en la plaza. No nos dejó dormir pero Mike Farris sonó a gloria, tanto que al ver que no podía levantar a mi destrozado compañero de fechorías fui a darme un garbeo por la ciudad y me acerqué directamente a ver a Farris, esta vez en el Azkena. En medio de la plaza casi choco con el sr. Pirner de Soul Asylum. Mi primer impulso era acercarme hacia él y saludarlo pero progresivamente se apartaba mirándome con ojos de: “¡Oh No!, ¡Otro puto pesado!, así que guiñé un ojo, sonrisa y a ver a don Farris.
MIKE FARRIS & THE ROSELAND RYTHM REVUE 9″5/10 LA IGLESIA DE LA ALEGRÍA
Me acerqué a ver a los THE NEW CHRISTS pero a pesar del enorme pasado de Rob Younger me pareció que el concierto era algo peñazo y las caras de la gente así lo atestiguaban. Me hice con una “Modelo” (hablo de cerveza… ya me gustaría a mí…) y tomé una de las primeras filas. Apareció Farris con su séquito contando con sección de viento (saxo, trombón y trompeta) y con dos orondas coristas de color que encandilaron. Tanto Paperboy como Farris lograron unas cotas de entrega y excelencia envidiables, otra fiesta que parecía sacada de una misa americana negra con musicazos. La voz del líder es absolutamente expresiva y abrumante y la alquimia conseguida con todo el conjunto hace que se alcancen varios éxtasis en los diferentes tramos de su actuación. Descomunal fue “Sit Down the Servant” como también lo fueron “Its Easier” o “Will the Circle Be Unbroken”. Lo único que empañó su actuación fue el inicio con un sonido exageradísimo, especialmente en el teclado que hizo que mucha gente saliera corriendo de las primeras filas. Los caretos de los de seguridad lo decían todo y el susto que se llevó una fotógrafa que estaba de espaldas hizo que casi se le salieran las lentillas. Ok, no es metal, pero este hombre ha nacido con estrella, y cuando la música es buena… siempre vale la pena.
MOLLY HATCHET 8/10 BOURBON DE CALIDAD
Creía que no vería nunca a los Hatchet a no ser que me fuera a hacer las américas, pero se hizo el milagro y el Azkena nos los trajo. Confieso que el miedo a una hipotética cancelación me torturaba, pero no, con la decepción de Bad Brains el cupo de desgracias ya era suficiente. Allí estaban ellos, arrancando con “Whisky Man” y deleitando al personal con su doble ataque guitarrero y ese feeling innato que tienen sus temas. Su batería Shawn Beamer lucía melena gracias al ventilador aunque su posterior solo no es que fuera ninguna maravilla comparado con los lucimientos dactilares de Bobby Ingram y Dave Hlubek. “Devils Canyon” y “Boogie No More” sonaron a gloria pero sería la preciosa “Fall Of The Peacemakers” uno de los momentos cumbre de la velada. Es su particular “Free Bird” y la verdad es que caló de lo lindo. Un gran Phil McCormack saludaba al país Vasco y lanzaba “Eskerrikaskos”, y es que siempre está bien que las bandas sepan donde tocan. De hecho hubo una banda que dijo “Thank You Bilbao” cinco veces. Para algunos la sorpresa llegó con la orgiástica versión de “Free Bird” pero para un servidor lo mejor fue, cómo no, “Flirtin With the Disaster”. Las banderas sureñas fueron apareciendo en escena y finalmente hubo una despedida emotiva. Gran concierto vaqueros…
THE SOUNDTRACK OF OUR LIVES X/10 GRATA IMPRESIÓN
No es que sea una banda a la que especialmente fuera a ver, pero debo reconocer que la poca impresión que les presté valió mucho la pena. En su particular túrmix le meten pop, psicodelia y buenos estribillos liderados por un cantante que tiene un deje vocal a lo Jim Morrison. Su entrega fue absoluta y hasta saltó al foso para levantar a la gente. Había mucha gente que estaba convencida de que iban a ser unos de los grandes triunfadores, personalmente no creo que fuera para tanto, pero si vuelven por aquí sí que me acercaré a verles.
FUN LOVIN CRIMINALS 6/10 EL GRAN CABREO DEL FESTIVAL
Nunca diré que fuera un mal concierto, de hecho a mi me gustó bastante tanto la estética de la banda como sus grandes temas, pero su batería consideró que la entrega del público no era la esperada. Razón no le faltaba pues la verdad es que el público del Azkena no es que fuera una olla a presión o el bullicio hecho carne. Tampoco hay que esperar las melés legendarias de Wacken con gente dispuesta a quedar paraplégica a la orden del grupo, pero lo cierto es que en las Breeders, Soul Asylum o los propios Criminals la cosa parecía un velatorio. Sus pintas de mafiosos perdonavidas quedan geniales pero su actitud sobre las tablas fue altiva y algo distante. Empezaron fuerte y bien con la cachonda “The Fun Lovin Criminal” pero la cosa se iría diluyendo poco a poco. La combinación de hip hop, disco y soul les hace sumamente especiales, pero cuando juegas a empatar es posible que pierdas el partido, y eso es lo que pasó. La soulera “Barry White” quedó genial pero la cosa no llegó a despegar ni con su single perfecto: “Scoobie Snacks”. “Smoke Em” tuvo un porrillo de atrezzo y lo mejor de la velada llegaría con “King Of New York”. Sus últimos cartuchos eran material de primera pues la emprendieron con el “Rock and Roll” de los Zeppelin perfectamente adaptada a las tesituras de Hugh Morgan. Lo siguiente en caer era el “We Will Rock You” de Queen y… bueno, digamos que si la gente ya no responde ante ésto ya nada puedes hacer. Así que Mike Reid se levantó, lanzó de mala gana sus baquetas y se largó. Hugh dio las gracias pero también optó por la retirada. La verdad es que todo el mundo esperaba más… aunque quizá ellos también de nosotros.
ALICE COOPER 7/10 REINANDO A MEDIAS
La verdad es que le hemos visto en mejor forma otras veces pero sigue siendo una gozada ver lo que este hombre puede hacer a los 60 años. Puede que a día de hoy ya sea mejor jugador de golf que cantante, pero su show todavía es capaz de tumbar a muchos de los actuales exponentes de shock rock. Su entrada a escena es de lo mejor que he visto nunca, con esas sombras actuando tras el telón, con su hija Calico de “partner” y al son de “Its Hot Tonight. “No More Mr Nice Guy” ya arrancó unas grandes ovaciones en un show que, sorprendentemente, tuvo muy poco de su último trabajo. El show tampoco tuvo mucho de espectacular si lo comparamos con anteriores venidas, pero sigue siendo todo un maestro. Siguió con la primeriza “Under My Wheels” y con la recuperada “Be My Lover” y me alegré de ver a Jimmy Degrasso en la batería. La banda hace tiempo que es bastante estable y eso se nota. Historia viva del rock en temas como “Im 18” (con Alice en muletas), “Is It My Body” o “Dead Babies” (cortada, eso sí pero con escenificación y cochecito incluido). De nueva hornada cayeron “Dirty Diamonds” con reparto general de collares de joyas y “Woman of Mass Distraction” con muy buena acogida. Siguió con “The Ballad Of Dwight Fry” y con “Feed My Frankenstein”, que no sonó como debiera pero mucho mejoró la cosa en “Halo Of Flies”. El solo en acústica del guitarra fue espectacular, especialmente porque se sale de la normalidad el no hacerlo con eléctrica. El show de la ejecución en la horca mientras la banda tomaba las voces en “I Love the Dead” fue absolutamente delirante con la gente volcada. Una maravilla fue el volver a escucharle cantando “Welcome to My Nightmare” y ver un final esplendoroso con diamantes de la talla de “Billion Dollar Babies”, con billetes a modo de confetti, un “Schools Out” masivamente coreado y un final derrochador con “Elected”. Buen show y toda una demostración de que queda Alice para muchos años, pero claro, el hombre tiene una edad, tira mucho del resto del grupo y muchas canciones son mutiladas en medleys. ¡Pero qué le vamos a hacer, sigue siendo Alice!
TOY DOLLS 9/10 LA MEJOR DESPEDIDA
Cierto que mi amor por estos ingleses de los 70 es absoluto, pero creo que objetivamente hay que concederles el título de uno de los mejores cinco directos del festival. Olga, Tom Goover y Mr Duncan son conscientes de que el tiempo es limitado y que la gente va de retirada pero no están dispuestos a que decaiga la cosa. Entre carreras y saltos y al ritmo de “Dig That Groove Theme” empiezan con un “The Lambrusco Kid” absolutamente desquiciado. El ritmo con el que descargan tema tras tema es frenético dando apenas un segundo de respiro y la carpa alcanza una temperatura sólo comparable a la de Eli Paperboy Reed, eso sí, cabe reconocer que los Dolls tenían la carpa a la mitad. Es espectacular ver a Olga a los 50 moviéndose como un chaval de 17, a Goover y a Duncan cantando e incluso tocando el violín. La cachonda “James Bond Lives in a Near Street” va seguida de “Bless You My Song” y el baile y los pogos se suceden por toda la carpa. Es genial ver como la gente entonaba todos sus temas. Caerían también “Idle Gossip”, “My Girlfriends Dad is a Vicar”, “Fiery Jack” o la coreable “She Goes to Finos”. La gracia de los Dolls es que instrumentalmente son muy buenos a pesar de ser una banda de punk y en la “Toccatta en Do Menor” de Bach dejan alucinados al respetable. Caería también del “Absurd-ditties” ese pedazo de single llamado “Alecs Gone” y del Orcastrated “Harrys Hands”. Hubo el numerito de la botella que lanza confeti y las guitarras que giran al unísono, pero el desparrame llegaría en la cachonda “Nellie the Elephant” y la genial “Dougy Giro”. El cerrojo definitivo vino con la festiva “Glenda and the Test Tube Baby”, otra joya imprescindible. Siguen siendo tan grandes hoy en día como lo fueron en sus inicios.
EPÍLOGO
Siempre todo es mejorable y quizá España esté todavía lejos de alcanzar niveles de calidad de los festivales europeos pero también está más que claro que el Azkena, posiblemente, esté a la cabeza del ránking nacional. Dimensiones humanas, sin colas, buen rollo entre asistentes, precios razonables y una población que acepta orgullosa el festival. Puede que muchos de nuestros lectores vean en Azkena un festival que queda lejos del metal, pero precisamente la magia de combinar estilos de rock, hard, soul y punk es lo que hace que la fiesta sea absoluta. Quizá sólo sea una opinión de alguien que escucha desde los Zombies a Pestilence…
Como siempre la mayoría de gente escribirá para quejarse de que tal set-list no está completo, que no he escrito sobre tal banda que le interesa o que me he equivocado en eso o en lo otro. Seguro que habrán mil fallos, cierto, pero aquí queda la crónica, hecha rápido, con prisas pero con suma cariño.
Agradezco especialmente todo a la mucha gente que conocí, a los muchos amigos que encontré y sobretodo a mi compañero de fechorías Kaly con el que las aventuras que vivimos no fueron pocas, pero eso ya lo contaremos en el blog. Esta crónica está sino hecha por los dos si comentada por ambos así que en gran parte también es suya. Lo dicho, un Azkena genial.
Jordi Zelig Tàrrega
Promotor:Last Tour International
Asistentes:30000
Día:16/05/2009
Hora:13:00
Sala:Mendizabala
Ciudad:Gasteiz
Puntuación:9
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