AZKENA ROCK FESTIVAL 9/10

El Azkena Rock Festival empieza a conseguir algo por lo que matarían la mayoría de festivales nacionales, y es el llegar a ser algo más que un festival. Su emplazamiento al lado de la preciosa ciudad de Vitoria-Gasteiz, un público fiel, ecléctico y buenrollista y una organización de notable hacen que esta cita, ya obligada, sea mucho más que un mero cartel de bandas y permite a sus asistentes disfrutar de todo más allá del recinto de conciertos.

Las “chucherías” eran muchas esta vez, contando con un campeonato de Guitar Hero, muchas tiendas de Merchandising, la posibilidad de tocar jams con batería, guitarra, bajo y micro, zona de relax con cojines y una zona de comida a la altura (Dios, que diferencia con esa vergüenza perpetrada en el anterior Kobetasonik en el que vendían mierda a precio de delicatessen -que quede claro que no utilizaría el término mierda en ninguna crónica, pero es que no le encuentro otro calificativo mejor o más acertado). Cierto, todo es mejorable, pero hasta los precios no eran abusivos: cerveza a 2″5 (a siete el cachi) , cubata 6 y chupitos 2. Carpa con escenario pequeño flanqueada con dos pantallas y otro escenario excelente con otras dos pantallas sirvieron para que nadie perdiese detalle de lo acaecido. Por cierto, los realizadores y cámaras realizaron un gran trabajo, buscando detalles de todo. Nada que ver con esos aprendices de Valerio Lazarov que destrozan más que filman en muchos otros festivales.

Entre los fallos podríamos incidir en que la cerveza Modelo mejicana no tuvo una acogida demasiado entusiasta y los constantes embrollos con los cambios de moneda llegaban a ser cabreantes. El hecho de que no existieran monedas de medio euro o que en la caja se negaran a darte cambio llegaba a situaciones algo estúpidas. “No me digas que no tienes cambio de siete cuando este chaval de al lado te ha pagado en monedas”. Lo dicho, todo es mejorable.

JUEVES 14 LA JORNADA MÁS FLOJA

Tras instalarnos en el centro mismo de Gasteiz y contemplando desde nuestra ventana la coqueta plaza de la Virgen Blanca nos dirigimos al recinto para asistir a la primera jornada, de largo la más flojita. Es una maravilla estar del centro ciudad al recinto en 15 minutos a pie. Desgraciadamente el hecho de pararnos a ver los muchos lugares de interés hicieron que nos perdiéramos a los BURNING.

Ya en el escenario menor (ese día todos los conciertos serían allí) vimos a los correctos WHITE DENIM que no disfrutaban de un gran sonido. La bola sónica hizo que saliéramos fuera pronto y “disfrutáramos” de su actuación desde el exterior.

THE FREEKS 7/10 PASTICHE ESTILÍSTICO

Toda una sorpresa. La verdad es que se notó el mucho backrground que atesoraban ya que algunos de sus miembros militan en Zen Guerrilla, Supersuckers o Fu Manchu. Esa mezcla de garage, rock y psicodelia es bastante interesante a pesar de que no había ningún tema que realmente quedara. La voz de Ruben Romano no es que sea precisamente una maravilla aunque combine bien con el pastiche estilístico que tienen como propuesta. Impagable la entrada del bueno de Andy Duvall a la batería lanzando una baqueta a lo alto y ver como la iba a buscar de forma torpona tras fallar estrepitosamente. Lo que en un primer momento nos pareció un freak que había bebido algo demasiado, pronto se destapó como el auténtico crack del grupo. Forma algo peculiar de tocar como baterista zurdo y con grandes dotes como vocalista. La banda mejoró con el intercambio entre batería y cantante. No han grabado nada, pero pueden ser muy interesantes en estudio.

THE BREEDERS 3/10 EN UN UNIVERSO PARALELO

Puede que sea un problema de aprecio personal, pero a pesar de que disfruté y sigo disfrutando de toda la generación Seattle nunca entenderé el relativo éxito de esta banda ni mucho menos el soporífero concierto que ofrecieron. Las gemelas Deal (una de ellas estuvo en los imprescindibles Pixies) parecían estar en una dimensión paralela, entrando con una balada desnuda y descafeinada. Los parones entre tema y tema eran eternos, básicamente por sus constantes bromas internas y con un buen baterista que mantuvo un pulso a una actuación realmente pobre. Ni “Cannonball” lo levantó. Rematando el súmum del aburrimiento contaban con una guitarrista de rastas en un córner del escenario y que simplemente estaba allí, pues apenas tocó la guitarra y de vez en cuando soltaba un coro imperceptible. Desde la teclista de Sigue Sigue Sputnik que no veía a ningún músico tan prescindible. Hay que unirle al universo paralelo de la banda otro universo más, todavía más a años luz de lo que allí sucedía. Esa mujer estaba allí sólo de cuerpo presente. De largo lo más insulso del festival.

JULIETTE LEWIS & THE NEW ROMANTICS 8/10 UNA DIVA QUE CUMPLE

Es fácil entrar a cargarse el trabajo de esta diva metida a cantante, pero es innegable que su entrega y carisma se vio acrecentado por el contraste que supuso pasar de las BREEDERS a ella. Su nueva banda es mucho mejor que sus anteriores agrupaciones (tampoco es que sean una gran maravilla) con las que ha contado y su directo es demoledor. Visualmente es imposible despegar los ojos de Juliette, que cuida su propuesta visual al milímetro. Vestía en vinilo rojo con el detallito de unas braguitas negras que se iban deslizando para abajo luchando para acercarse a sus pies. El toque sexy se acrecentó con las plumas glam negras contrastando con el rojo intenso de chaqueta y pantalones. Se notan sus dotes de actriz pues sabe como encandilar al público. Culminando su entrega se lanzó a las primeras filas consiguiendo una batalla campal por las preciadas bragas. Afortunadamente sobrevivió al baño de masas y logró subirse algo mosqueada a escena. De largo lo mejor de esta jornada.

HARDCORE SUPERSTAR (6/10) BREVES Y DECEPCIONANTES

Decepción, y es mucho más dura cuando viene por parte de una banda a la que uno les tiene un cariño especial. Los suecos salieron tarde y a eso hay que añadirle el agravante de que muchísima gente optó por retirarse, por lo que terminaría siendo un show corto entre familia. Si en sus inicios eran una banda que me dejaba boquiabierto por esa excelente combinación entre punk y rock y esas descargas tan intensas como imprevisibles, ahora me parecen una banda más de tantas escandinavas. También ahora les va el rollo de vestirse a lo rock star cuando en sus inicios era todo a pecho descubierto. Lo que no me esperaba es que centraran casi todo el set en su inminente nueva obra, así que todos esos himnos quedaron olvidados. Temas como “Medicate Me” o la abrasiva “Bag on Your Head” gustaron y disfrutaron de un gran sonido, pero pronto la cosa volvió a torcerse. El audio de introducción de un corte no entró y el grupo se retiró momentáneamente. Imperdonable no tocar ningún título de su opera prima ni la excepcional “We Dont Celebrate Sundays”.

A pesar de ser un jueves las carpas funcionaron y disfrutamos de Djs y una buena ración de rock and roll y metal para los más trasnochadores. Buen ambiente y comunión entre los valientes que le hicieron frente al frío gélido de la primera jornada. Por cierto, las lluvias anunciadas para el festival finalmente no se presentaron.

VIERNES 15

La noche anterior hizo que nos alargáramos en demasía y nuestra alegría por estar justo en el centro neurálgico de Gasteiz se nos volvió en contra. Puntualmente don Eli Paperboy Reed hizo las delicias de todo el público vitoriano al ofrecer un concierto en la plaza de la Virgen blanca, lo malo es que nosotros intentábamos dormir al lado. No pude dormir pero aprecié el excelente buen hacer del americano y me presenté raudamente a su posterior actuación en el festival.

ELI PAPERBOY REED 9/10 TRIUNFADOR

Una de los grandes triunfadores del festival. Espectacular actuación con los True Lovers deleitando. La sección de vientos brilló en temas como “Its Easier” o “The Satisfier”. Es un frontman excepcional y convirtió la carpa en una fiesta absoluta consiguiendo una comunión alucinante entre público y banda. Dio un colorido especial al festival y el cierre con “(Doin the) Boom Boom” fue uno de los momentos más alucinantes de las tres jornadas. Alcanzó el delirio entre los presentes, ya fueran heavies, rockeros o gafipásticos. Si es una estrella en ciernes es porque lo merece.

U.K. SUBS 4/10 PARCHE A BAD BRAINS

Los enormes Bad Brains eran de largo una de las actuaciones más esperadas para todos y su cancelación fue la más dolorosa. Creía que nunca los vería… y sigo creyendo que no los v eré nunca. Puede que el sentimiento de pérdida fuera tan grande que influyera a la hora de apreciar la entrega de los UK Subs. El sr. Charlie Harper dirige a la agrupación que cuenta con sólo él como miembro original por lo que, a pesar de su competente banda de apoyo, uno lo ve más como una banda tributo que como a los legendarios UK Subs. A pesar de ello tampoco es que estos ingleses consiguieran un éxito notable en su tiempo ni que contaran con muchos fans entre el público, así que la gente apenas reaccionó ni llegó a reconocer sus temas más clásicos.

THE ZOMBIES 9″5/10 ÉXTASIS EN EL TÚNEL DEL TIEMPO

Esplendorosos. A pesar de que en su entrada muchos vieran a unos abueletes que parecía que iban a tocar en el Imperator barcelonés (extinta sala de conciertos destinada para el recreo de la tercera edad) consiguieron convencer hasta al más crítico. White y Argent dirigieron un show para el recuerdo que se inició con la sublime “I Love You”. Espectacular fue el trabajo en los coros en los que todos cantaban dotando a los temas de la enorme belleza polifónica que siempre les caracterizó. Argent desde su pedestal de teclados anunció tres joyas del “Odyssey and the Oracle”, y a algunos les afloraron las lágrimas en la portentosa “A Rose For Emily”. Puede que a muchos se les hiciera algo tostón o que la abundancia de medios tiempos les resultara tediosa, pero cualquiera que les conociese disfrutó de lo lindo. “Beenchwood Park” sonó a gloria como lo haría luego la enorme “Care of Cell 44”, una brillante mezcla entre The Beatles y los Beach Boys. Destacar especialmente la labor del gran bajista Jim Rodford (The Animals), pero sobretodo el “tapado” guitarrista Keith Airey (Tom Jones y Nick Kershaw) que cuando se soltó dejó a los presentes boquiabiertos. Metieron “Hold Your Head Up” de Argent entre joyas como “Don»t Cry for Me”, pero sería la recta final la que sería realmente apoteósica con la genial “Time of the Season” o la rotunda “Shes Not There”. Ya cuando todo parecía terminado Argent presentó esa joya llamada “God Gave Rock and Roll”, himno definitivo del rock popularizado por Kiss (y es que Simmons siempre fue gran fan de Argent). Arrancaron enormes ovaciones y en las presentaciones del grupo fue muy bonito ver como a Rodford le afloraban las lágrimas. Definitivamente el concierto más especial y emotivo de este Azkena.

SOUL ASYLUM 6″5/10 MANTENIENDO EL TIPO

Los de Dave Pirner son un claro ejemplo de banda asociada a un tema, y es que “Runaway Train” fue un un auténtico bombazo que llegó a ensombrecer el trabajo realizado en discos como “Grave Dancers Union” o “Let Your Dim Light Shine”. Arrancaron con la demoledora “Somebody to Shove” pero la respuesta no fue la esperada pues había mucho desconocimiento entre la gente ante sus temas. Alucinante el descomunal tamaño de Michael Bland, tan asombroso como su excepcional destreza con el instrumento. Evidentemente “Runaway Train” fue el momento sublime de su descarga pero un servidor disfrutó más con “Black Gold” o con “Misery”. Pirner y Dan Murphy rayaron un buen nivel y consiguieron convencer a medias a los muchos asistentes. Si son una banda clásica es por algo aunque puede que esta vez no llegaran a su máximo nivel.

THE BLACK CROWES 9/10 UN GRANDES ÉXITOS DE ENSUEÑO

Sabíamos que los cuervos negros presentaban en los States su “Warpaint” y que lo tocaban entero, pero el hecho de que hacía ya mucho tiempo que no venían por aquí hizo que definitivamente se decidieran a tirar de hits. El arranque con “Sting Me” y “Twice As Hard” quita el hipo, apoyadas por un sonido excelso y un par de coristas de color, eso sí, con más belleza que voz. De hecho las que acompañaron a Mike Farris sí que sentaron cátedra con sus dotes vocales. Los hermanos Robinson lideraron un concierto que encandiló pero al que muchos criticaron por sus habituales y largas jams. Para un servidor la cosa estuvo en su medida justa, y más cuando arremeten con piezas como “Soul Singing” o “Oh Josephine”. La verdad es que todos los temas de “Warpaint” tienen una calidad que no palidece ante el peso de los clásicos. “Goodbye Daughters of Revolution” es el mejor ejemplo de que en su última obra hay grandes temas que incluso ganan sobre un escenario. “Wiser Time” nos devolvió a los tiempos del “Amorica” y “Jealous Again” repuntó la fiesta. La entrega del público era excepcional y la banda atesoraba una aura de auténtica leyenda. Detrás del escenario lucía una bandera americana con el símbolo de la paz en vez de las estrellas. Ya en el último tramo hicieron sonar la preciosa “She Talks to Angels”, la imprescindible “Hard to Handle” y la gloriosa “Remedy”. El broche de oro lo puso “Thick N Thin” que despidió a una banda que demostró el porqué ya son, por derecho propio, una auténtica leyenda viva. El vuelo de los cuervos será recordado por todos los que allí estuvimos, a pesar de que no estuviera Marc Ford.

SET LIST:

  • Sting Me
  • Twice As Hard
  • Goodbye
  • Daughters Of The Revolution
  • Hotel Illness
  • Soul Singing
  • Oh Josephine
  • Wiser
  • Time
  • Thorn In My Pride
  • Poor Elijah 
  • Tribute To Johnson (Medley)
  • Sister Luck
  • Jealous Again
  • Hard To Handle
  • She Talks To Angels
  • Remedy
  • Wounded Bird
  • Thick N Thin

ELECTRIC EEL SHOCK 8/10 RESUCITANDO A LOS CANSADOS

Cuando ya son las tantas y la gente enfila el camino de vuelta a casa hay que salir a por todas para conseguir que la gente se pare y se gire para ver que diablos sucede sobre el escenario. Estos japos medio rockeros medio metaleros sabían que tenían que romper con todo para captar la atención, y os aseguro que lo hicieron y de qué manera. Elecrtic Eel Shock fueron una descarga de desfibrilador y ganaron un enorme puñado de fans a base de contundencia y algo de freakismo. Su batería desnudo (con un calcetín en el rabo) y dos baquetas por mano ya era todo un espectáculo en si mismo. Las otras dos partes del trío salieron sobre escena pasados de frenada y haciendo que hasta el más perezoso se moviera al son de trallazos como “Suicide Rock and Roll”, “Rock and Roll Rescue The World”, “Bastard” o “Scream for Me”. El agotramiento hizo que los viera algo alejados, pero os aseguro que en Wacken los veré lo más cerca que pueda; son pura electricidad.

Al igual que la anterior noche las carpas hicieron que el bailoteo y el alcohol siguieran campando por el festival hasta altas horas de la mañana.

Jordi Zelig Tàrrega

Promotor:Last Tour International

Asistentes:30000

Día:14/05/2009

Hora:13:00

Sala:Mendizabala

Ciudad:Gasteiz

Puntuación:9