A pesar de que mis previsiones no auguraban una afluencia destacada a esta más que interesante gira a su paso por nuestro país, he de decir que me sorprendió comprobar como alrededor de unas 500 personas se habían dado cita en el Razzmatazz II para presenciar a los renacidos MAD MAX y al maestro AXEL RUDI PELL por primera vez de gira, en casi 20 años de carrera, por aquí por España.

Para la inmensa mayoría de gente, ésta debía ser su primera experiencia con AXEL RUDI PELL. Un servidor contaba con 5 previas en diferentes festivales de los últimos 8 años así que, con toda la modestia del mundo, puedo afirmar que no me sorprendió en absoluto nada de lo que presencié esta noche de Domingo; Ni lo malo, ni tampoco lo bueno.

 

Afirmar que MAD MAX tienen a día de hoy cierta relevancia está completamente fuera de lugar. De hecho, más allá del Single de marras que todos conocemos y coreamos en su show, y que les otorgó cierta popularidad a mediados de los 80, estos alemanes nunca tuvieron, ni por asomo, el éxito de bandas coetáneas como VICTORY, KINGDOME COME, SINNER o BONFIRE. A pesar de ello, sí es cierto que a día de hoy, suponen, como la inmensa mayoría de bandas de tercera fila que se reúnen, una entretenida propuesta para complementar las giras de artistas de mayor peso o relevancia, caso del señor AXEL RUDI PELL. MAD MAX retomaron su camino hace poco con nuevo disco bajo el brazo de nombre más que explícito "Night Of The White Rock" en el que profundizan, de forma más acentuada que años atrás, en la temática religiosa. A falta de que salga al mercado su próximo disco "White Sound", previsiblemente a lo largo de este 2007, la banda ha tenido la suerte de colarse en la gira del señor AXEL RUDI PELL, cuyo público, seguramente sea el mismo al que va dirigida la propuesta de los propios MAD MAX.

 

Su actuación, o al menos la mitad de la misma que pude presenciar, estuvo francamente bien. Entré justo en la sala a ritmo de "Fox On The Run", el famoso tema de los THE SWEET que MAD MAX se apoderaron e hicieron todavía más famoso, sobretodo entre la parroquia metálica y más concretamente aquí en España, donde muchos lo recordarán como la sempiterna sintonía de arranque de la añorada Emisión Pirata, ("¡¡¡¡Errreeeeee, al teléfonoooo!!!!", ¡Aquello sí que era radio!). Tras "Fox On The Run", que como era de esperar, fue coreada por todo el público allí presente, MAD MAX descargaron algún que otro hit del pasado como "Hearts On Fire" y un par de piezas nuevas más como "We Fight In White" de su próximo disco y "Raise Your Voice" de su último trabajo "Night Of The White Rock" del año pasado, en la que la banda invitó al respetable a apoyarles en los coros y sorprendentemente, obtuvo respuesta.

 

El sonido estuvo francamente bien (Mejor lo estaría con AXEL RUDI PELL) y la entrega del público, fue notoria tratándose de una banda telonera relativamente desconocida. Desde luego, a pesar de los años, MAD MAX parecen haberse puesto en forma de nuevo y es más que probable que tengan cuerda para algunos añitos más.

 

Tras cambiar los 2 paneles que el grupo alemán había situado a ambos lados del escenario, cambiar la batería y colocar el telón de fondo con el logotipo de AXEL RUDI PELL, Johnny, Mike, Axel, Ferdy y Volker saltaron a escena. Lo primero que me sorprendió fue comprobar el fabuloso sonido con el que estaba contando el grupo desde el principio, y que a partir del tercer o cuarto tema se convirtió de lejos en una de las mejores sonorizaciones que recuerdo haber oído en el Razzmatazz II (Al menos, por la zona por donde estaba situado el técnico de PA).

 

La encargada de abrir su repertorio fue como viene siendo habitual comúnmente la pieza que encabeza el nuevo trabajo del artista, en esta ocasión, "Fly To The Moon", que ya de buenas a primeras contó con el beneplácito del público, entregado desde el los primeros acordes del show. Siguiendo en la misma línea directa y potente la banda entregó un efectivo "Strong As A Rock" que parece haberse asentado en el Setlist del grupo últimamente desde que la presentaran por primera vez hace unos años. Con  "The Masquerade Ball", sucedió lo que ya me temía que iba a suceder. Siendo un muy buen tema como es, no creo que llevarla al directo sea lo más acertado; Con tan largo minutaje, un tempo tan relajado y místico y un solo entre medio de Axel kilométrico, a la audiencia se le corta el ritmo de la actuación, la cuál había empezado de forma bastante directa y energética. No ayuda demasiado, que digamos, el empalmarla con otro gran tema, pero igualmente de naturaleza lenta y atmosférica como la genuina "Casbah", en medio de la cual, Axel y Mike Terrana, el segundo tras el primero, ejecutan sendos solos, para acabar de rematar la faena. Resultado total; Primeros 45 minutos de concierto y apenas han sonado 4 canciones. Ustedes dirán. Sí es cierto, y nadie lo niega, que Axel Rudi Pell y Mike Terrana son unos músicos soberbios. Hasta aquí todos estamos de acuerdo. Pero lo que no tiene ningún sentido es dedicar tanto tiempo al lucimiento individual de cada instrumentista cuando en mitad de, por lo menos 4 o 5 temas, a lo largo de toda su actuación, todos estos músicos ya incluyen momentos solistas extras en las partes pertinentes. Especial tirria empieza a producirme el solo de Mike Terrana. Creo que puedo haber visto a "La Bestia Del Ritmo" del orden 25 o 30 veces en los últimos 10 años, y eso, me permitirán ustedes, aburre soberanamente. Lo más curioso del asunto es que el señor Terrana se llevó más aplausos al final de su mini show (Compendio de Ego, demostración de fuerza, imitación de Frank Sinatra) que el propio Axel Rudi Pell. En fin.

 

Pero aquí no acabaría todo, pues tras presentar otro tema nuevo, "Mystica", sublime y cautivadora, la banda al completo llevó a cabo un set acústico a priori interesante, pero que contó con una versión de KISS del tema "Love Gun". A pesar de que les quedó perfecta -Y esto lo dice alguien que no siente especial predilección por KISS- estamos en lo mismo, ¿Era necesario tirar de versiones con tantos temas propios en la recámara?, Deduzco que Axel y compañía así lo creen porque tras el famoso himno de KISS y un apoteósico y baladístico "Oceans Of Time" también en formato acústico, AXEL RUDI PELL se convirtieron en RAINBOW para interpretar su ya típico "Temple Of The King", versión extendidísima, por supuesto.

 

Por suerte, llegados a este punto, la banda decidió tomar las riendas de la actuación y encadenó uno tras otro los potentes hits del grupo más directos y acertados para el directo como "Tear Down The Wall", "Caroussel", "Rock The Nation" y "Call Her Princess", esta última, de nuevo con innecesarios momentos solistas de Axel Rudi Pell y Ferdy Doernberg. Tras ausentarse durante escasos segundos, la banda al completo regresó al escenario para ejecutar una esperada "Fool Fool" que puso el punto y final a esta poco equilibrada actuación.

Axel Rudi Pell, mostró en todo momento tener una clase magistral propia de los grandes maestros de las 6 cuerdas. Podrá gustarte más o menos su forma de tocar, pero es innegable que todas sus composiciones poseen un gancho y un sello personal indiscutibles.

 

Curiosamente Axel parecía estar bastante enfermo tal y como nos hizo saber Johnny Gioeli desde encima del escenario. De hecho, tras el show de Barcelona, la banda pararía el tour para que Axel pudiese ser hospitalizado, dejando en el aire los 4 shows restantes en Inglaterra y Alemania. Sabemos que es lo que el señor Axel sufre, y sin ser nada especialmente grave, creemos no oportuno recalcarlo aquí pues son cosas que pertenecen al terreno personal extra musical. De cualquier forma, da pánico pensar cómo podría haber tocado el ex-guitarrista de los STELEER de haber estado a pleno rendimiento. Supongo que lo comprobaremos en algún que otro festival veraniego porque dudamos mucho acerca de la posibilidad de volver a ver a AXEL RUDI PELL por estas latitudes de gira.

 

Secundándole, se encuentra desde los primeros días del grupo su inseparable bajista y amigo Volker Krawczak, quién, por su propia salud, debería perder algo de peso. A nadie salvo a él le importa lo más mínimo algo así, pero sí es cierto que dicho problema repercute notablemente sobre su puesta en escena, totalmente inmóvil y en el tramo final de la actuación, incluso desmejorado y agotado físicamente. Mucho más enérgicos se muestran los 3 restantes miembros del grupo. Mike Terrana es y sigue siendo Mike Terrana. Con eso queda todo dicho. Ferdy Doernberg, a quién desde aquí amenazamos con tomar medidas drásticas sino recupera a Jan Barnett y reanuda la actividad con sus ROUGH SILK, hace ganar muchísimos enteros a la banda. Por un lado es un fenomenal y muy original teclista. Igualmente lo es con una guitarra bajo el brazo, acústica o eléctrica. Como no, su voz ayuda también mucho a mejorar el sonido global del grupo, apoyando en los coros más altos y agudos a Johnny Gioeli y doblándose la voz con él logrando recrear los coros que aparecen en los discos, de una forma muy notable, sin necesidad de tirar de samples pre-grabados como hacen la inmensa mayoría de grupos.

 

El último en discordia, que no menos importante, Johnny Gioeli, lo bordó, una vez más. Es pasmosa la forma que tiene de cantar este tipo. Da igual donde toque, con quién toque, a que hora toque o qué toque, sencillamente deja en ridículo a miles de vocalistas sobre un escenario. La perfección de su trabajo vocal llega a cotas excelsas y resulta complicado dar con un solo instante de su actuación donde éste se saga de tono, se quede sin voz o recurra al público para suplir sus carencias. Han pasado muchos vocalistas por AXEL RUDI PELL, pero ninguno le ha dado un carácter tanto en estudio y en directo tan genuino como Johnny Gioeli, quién esperemos esté muchos más años en el grupo (¡Apostamos por ello sabiendo cuál es su profesión y estatus social!).

 

Tras 2 horas aproximadamente, el concierto finaliza y a uno le queda la sensación de que, habiendo no abusado de una forma tan descarada de los momentos solistas egocéntricos, y ocupando ese espacio bacante con temas de 4 o 5 minutos del extenso catálogo del señor AXEL RUDI PELL (12 discos completos ni más ni menos), el concierto habría sido de matrícula de honor para arriba. Pero por desgracia no fue así y el señor Pell, junto a sus vasallos, dejó bien clarito que toque en un festival 50 minutos o en su propio show 120, vamos a tener que apechugar con todo su repertorio de solos, versiones, estiramientos musicales e innecesarios ejercicios prácticos y visuales de su batería y teclista. Toda una lástima.

Javi Félez (Javi Metal)

Promotor:Matarile

Asistentes:600

Día:04/02/2007

Sala:Razzmatazz II

Ciudad:Barcelona

Puntuación:7