ATARFE VEGA ROCK 2008: CRÓNICA DEL SÁBADO

ANGELUS APATRIDA (13:50)

Tras el buen sabor de boca que nos dejaron los granadinos TRIBAL, a base de un logrado thrash-death melódico, les llegaba el turno a otra banda nacional, a los emergentes ANGELUS APATRIDA. Venían con ganas de despertarnos y de quitarnos las lagañas, y ¡vaya si lo consiguieron!. Sin ánimos de sonar exagerado, el cuarteto albaceteño bordó una de las mejores actuaciones de las dos jornadas de este festival. Fueron a por todas desde el primer momento, y todo su buen hacer reflejado en sus dos discos hasta la fecha “Evil Unleashed” y “Give`Em War”, se palpa con mayor entereza en directo. Thrash metal con un par de narices, una imaginería compositiva fuera de toda duda, y una fuerza y contundencia propia de los grandes, fue lo que se vio reflejado durante las interpretaciones de “Corruption”, la propia “Give`Em War” o “Versus The World” por citar algunas de un repertorio sin fisuras. Algunos lo consideran una de las mayores promesas de la escena estatal. Después de este concierto, dicho apelativo se les queda corto. Son una realidad. 

KORPIKLAANI (14:55)

Era la tercera vez que podía disfrutar del show de Korpiklaani, unos ya habituales de estas latitudes, muy a pesar de que sus raíces están en el folk finés de tierras gélidas. A destacar la excepcional entrega tanto en la arena como en las gradas ante el pulso festivo con el que suelen pujar Korpiklaani. “Wooden Paints”, la misma “Korpiklaani” o uno de sus himnos como es “Cottages and Saunas” evidenciaron que el sonido les respetó en sobremanera, algo bastante excepcional en lo que fue habitual en el festival. Acordeón y violín sonaron limpios y claros y decenas de borrachos hicieron danzas etílicas con las cervezas al compás de “Pellonpekko” o “Journey Man”. Esperaba algún tema de su último trabajo como “Keep on Galloping” pero nada, no hubo concesiones a su próximo trabajo. A destacar “Hunting Song”, “Let»s Drink” que fue el único tema de TERVASKANTO. Finalmente “Il Lea Voibmi” de sus primerizos trabajos y la hiperfestiva “Beer Beer” cerraron una actuación que mejoraba lo ofrecido en el Martohell del pasado año pero que padilecía enfrente de la del Wacken 2006. No es bueno que una banda se haga muy habitual en todos los festivales, aún y así son una fiesta constante.

SET LIST KORPIKLAANI

Wooden PintsKorpiklaaniCottages & SaunasTuli KokkoPellonpekkoJourney ManPaljon on KoskHappy Little BoozerHunting SongLet»s DrinkII Lea Voibmi

Beer Beer

GRAVE DIGGER (16:15)

No es que la presencia de la banda de Chris Boltendahl fuera de las más esperadas de la jornada. Pero sus más fieles seguidores pueden sentirse orgullosos por todo lo expuesto durante su tiempo de escena. Después de que su habitual Muerte saliera a dar la bienvenida, y con toda la banda plantada en el escenario, los germanos dieron muestras de que pocos saben reflejar como ellos la más pura esencia del metal alemán. Tan sonrientes como siempre y tan simpáticos como nunca, consiguieron hilvanar un concierto ameno a la par que directo a base de himnos con nombres y apellidos. “Excalibur”, una esperada “Knights Of The Cross”, que fueron de las primeras en caer, o su imprescindible “Heavy Metal Breakdown” al cierre, fueron algunas de sus mejores interpretaciones, y de las que más hicieron participar al respetable. Y es que siempre fueron sobre seguro, sin arriesgar, pero con tal colección de clásicos quien no lo haría. Chris estuvo comunicativo en todo momento, y sus guitarristas Manni Schmidt  y Thilo Herrmann se compenetraban arriba y abajo haciendo que el dinamismo fuera la nota predominante. Nunca espectaculares, pero siempre efectivos. Vinieron y se fueron con los deberes hechos, aunque el sonido no les hiciera justicia.

MY DYING BRIDE (20:20)

Oh lo que nos esperaba. La justificación del viaje en mi persona estuvo avalada por la actuación de los ingleses. Ni el sonido fue perfecto ni el tiempo de disfrute adecuado (¡¡se hizo demasiado corto!!). Pero aquello minimizó los “contras” y no fue suficiente para declarar que fue uno de los mejores conciertos del festival junto al de SALUGHTER que habían tocado en el slot anterior. Con unas luces tenebrosísimas gobernadas por el mismo técnico que lleva los controles de bandas como PARADISE LOST – este hombre es un personaje donde los haya, se pasó la tarde del sábado andando de un lado a otro con su vaso de cerveza -, los de Halifax realizaron un gran concierto superando en nota al que pudimos ver hace ya dos años (¡cómo pasa el tiempo) en el Metalway de Gernika. Sin duda alguna el hecho de tocar en la más absoluta penumbra y de contar con un escenario sobrio, oscuro pero con ese reloj de fondo al más puro estilo de la “Clock Tower” o “Big Ben” de Londres con la esfera brillando en la penumbra causaron un efecto más que adecuado para una música tan sumamente sensorial y dependiente de la atmósfera. La banda venía en cuadro, y es que después de la espantada de Ade que desde el pasado 2007 comenzó una nueva andadura en Estados Unidos; el reemplazo de John Bennett a la batería con lo que creo que han ganado puntos;  y la forzosa ausencia de Sarah Stanton a los teclados, había dudas sobre cómo se adaptaría el combo británico a las circunstancias. Hay que decir que la nueva bajista Lena Abé no tiene nada que ver con el propio Adrian Jackson; tienen dos formas de ver la música diferente, pasando ésta más inadvertida. En el caso de Sarah, su falta fue justificada ya que espera ser madre próximamente. Desde luego el hijo será un auténtico doomster viniendo de una pareja como la que forman Sarah y Hamish. Pero en cualquier caso, el núcleo duro formado por Aaron y Andrew estaba presente y aquello fue más que suficiente para guiar a los menos iniciados.

Antes de bajar el telón, pudimos ver a Aaron chequeando su micro y el resto de equipo antes de comenzar la actuación. Luciendo su característico “mono de trabajo”, el de West Yorkshire salió con las pinturas de guerras y dispuesto a desolar Atarfe. Y vaya si lo consiguió. Ya con “Catherine Blake” el sentimiento de pesadumbre inundó el foso y a muchos se nos dibujó una sonrisa al intuir que aquello sería algo digno de recuerdo. Hicieron bien en concentrar los temas de los últimos discos al principio, y dejar lo mejor para el final, con una serie de temazos que muchos esperábamos y que son clásicos en sus directos. De nuevo la variación de esquemas respecto a actuaciones anteriores no fue grande, pero esto quizá dio más igual en el caso de MY DYING BRIDE. El delirio llegó con las típicas notas introductorias de “The Cry Of Mankind” que volvieron a poner los pelos de punta – eso sí, los teclados sonaron demasiado bajos y por momentos no se podían descifrar correctamente – y la siempre bien recibida “She is the Dark”. Aaron por aquel entonces ya se había tirado al suelo retorciéndose de dolor, mientras que Hamish y Andrew flanqueaban el escenario cada uno en un extremo junto a su monitor. Los bruma provocada por el constante humo ambiental que se repartía por el escenario creó un ambiente todavía más decadente y misterioso, y entre las nubes blancas surgió de nuevo la figura de Aaron para arrancarse con un tema como “She is the Dark” que puso los pelos de punta. La banda cuando toma carrerilla suena brutal en las partes guturales y fue así como las reminiscencias más doom/detah tomaron importancia a lo largo del tramo final de su actuación. Ya no importaron las deficiencias de sonido – en cualquier caso, indudablemente mejor que el del viernes -, los acoples o cualquier otra adversidad. “The Dreadful Hours” metió un poco más el dedo en la llaga y acto seguido la redención final llegó de manos de “The Forever People” esa golosina que siempre nos dejan de “As the Flower Withers”. Desde luego, no me cansaré de ver a esta banda, a la que seguiré todas las veces que pueda. Si en disco hay cosas que se me plantean cuesta arriba, de momento en directo siguen enganchando. Buena nota para MY DYING BRIDE.

Set list MY DYING BRIDE

• Catherine Blake
• …Ant I Walk With Them
• Thy Raven Wings
• The Cry of Mankind
• She is the Dark
• The Dreadful Hours
• The Forever People

WITHIN TEMPTATION (1:30)

La penúltima actuación del festival corría a cargo de los holandeses WITHIN TEMPTATION. Para nadie pasa desapercibido que este concierto tenía connotaciones cuanto menos extrañas por aquello de la entrada especial que no se hasta qué punto supuso un incremento considerable de público específico de la banda. En cualquier caso, ellos quedarían contentos y no creo que nadie que estuviera disfrutando del festival al completo tuviera alguna pega al respecto. Es más, pese a ese previsible flujo de gente, el foso no llegó ni mucho menos a llenarse. Esa fue la nota triste de la jornada, que ni con los supuestos cabezas de cartel se alcanzase el nivel máximo de asistencia. ¿La hora?, ¿lo rocambolesco del formato?, ¿la tónica general del festival?. No hay una única razón que lo explique. El caso es que las 3000 y pico personas que podríamos estar allí pudimos ver una vez más a la banda de Sharon den Adel. Habiendo visto en directo a la formación de los Países Bajos más de media decena de veces, he de decir que este concierto no tuvo muchos secretos respecto a los realizados por la banda en nuestro país en los últimos tiempos. El hecho de que faltasen las clásicas torres hinchables o algún que otro elemento del atrezzo que generalmente utiliza WITHIN TEMPTATION en su escenografía no fue determinante a la hora de contemplar el espectáculo. Es cierto que sí que contaron con las proyecciones correspondientes a su último trabajo, y creo que eso fue más que suficiente para la mayoría de los asistentes. Así que con una gran pantalla de fondo y un escenario limpio de todo artificio extra, el sexteto sinfónico saltó al escenario con ganas de cumplir con su  cometido. La última en dejarse ver fue Sharon, que desde el lateral del escenario comenzó a cantar sin que todavía se intuyese su figura. El delirio entre las primeras fue grandioso. Había sonado la intro de “The Silent Force” y ya nos metíamos de lleno en un tema como “Jillian”. Sharon vestía su vestido blanco que si no me falla la memoria ya ha utilizado en conciertos anteriores y si me apuran hasta en algún vídeo del pasado. El contraste con las altas botas militares era llamativo y vestuarios aparte, hay que decir que la vocalista una vez más estuvo radiante. Es el valor seguro de esta banda: ella siempre canta bien y se muestra espléndida sobre el escenario. Sus acompañantes….pues lo que podíamos esperar. Los movimientos los tienen medidos al milímetro, y salvo algún problema de sonido con la guitarra de Ruud y el teclado de Martijn, todo lo demás transcurrió según lo previsto. Robert no dio pie a las sorpresas y además de agitar su guitarra como es habitual, pierna al frente, nos obsequió con algún que otro speech en castellano como viene siendo habitual. Recordemos que el guitarrista vivió un tiempo en Madrid durante su niñez y he de ahí su conocimiento del idioma.

Los temas se sucedían y pronto pudimos darnos cuenta de que el peso del concierto recaería en los cortes de “The Heart Of Everything” y “The Silent Force”. No voy a decir que mi gozo cayera en un pozo ya que se puede asumir de antemano que los temas de “Enter” ya prácticamente no cuentan para los directos de WITHIN TEMPTATION. Pero habría estado bien ofrecer un guiño hacia aquellos fans que conocieron a la banda desde sus comienzos y que tienen en la cabeza esos temas más decadentes. En cualquier caso, esta vez el tono era más jovial y tratamos de zambullirnos en lo que nos tocaba. Para ser un festival, la actuación superó con creces la del pasado Metalway de Gernika, por poner un ejemplo. Tuvo más gancho y fue más vistoso, por aquello de tocar ya con la noche cerrada y en un ambiente más propio para interpretar las canciones. La banda suena compacta pese a la multitud de efectos y arreglos que lleva grabados y actúa de forma clónica. Si Sharon ocupa el frontal del escenario, el resto ya sabe que tiene que flanquearla. Y así con todo.

El tiempo pasaba y como no, uno de los momentos álgidos de la noche vino de la mano de “Our Solemn Hour” en el que el estribillo con el pegadizo “Sanctus Espiritus” fue ampliamente coreado. También hubo momentos más dulcificados como el de “Angels” y como no, lo que muchos estaban esperando: el combo “Mother Earth”. “Deceiver Of Fools” y “Ice Queen” miraban al pasado de la discografía de la banda, y pese a sonar correctamente, personalmente creo que no emocionaron tanto para alguien que ha visto el mismo final de concierto durante los últimos tres/cuatro años.

Haciendo balance, hay que decir que los que no hubieran visto nunca a la banda o bien quedarían contentados – siendo fans o gustándoles mínimamente WITHIN TEMPTATION- o pasarían de puntillas sobre el concierto – en el caso de no serlo o no gustarles la propuesta-; los que ya los hubieran visto anteriormente tienen otra muestra más de la capacidad interpretativa de Sharon y los suyos, en especial de la primera; y los que ya les hemos visto en bastantes ocasiones…pocas novedades al respecto. Un concierto más y punto. Me sigo quedando con aquella vibrante actuación en la sala Caracol junto a PARADISE LOST. Sin duda.

Set list WITHIN TEMPTATION

• Intro The Silent Force
• Jillian
• The Howling
• Stand my ground
• The cross
• Hand of sorrow
• The heart of everything
• What have you done
• Forgiven
• Our solemn hour
• Forsaken
• The promise
• Angels
• Mother Earth
• The truth beneath de Rose
• Deceiver of fools
• Ice queen

BELPHEGOR (3:35)

Si MAYHEM el día anterior tocaron menos de 20 minutos, BELPHEGOR lo cierto es que no tocarían mucho más (algo más de media hora), dejando a los dos grupos de black metal metal del festival en una posición bastante extraña, en gran parte motivada por su posicionamiento horario. El inicio del concierto fue absolutamente demencial y vergonzoso. ¡Durante todo el primer tema la banda estuvo sin sonar por la PA! El sonido provenía tan sólo de sus monitores. Increíble. Supongo que debimos de sentirnos afortunados al escuchar voz y batería (nada más) a lo largo de la segunda canción. Afortunadamente la segunda mitad del concierto fue algo más digna y los austriacos pudieron demostrarnos de qué están hechos escupiéndonos grandes temas como “Lucifer Incestus” y “Swarn of Rats”, así como la notable “Chants for the Devil 1533”, de su último disco editado hasta la fecha. Si algunas de las señoras cincuentonas que entraron justo antes de que empezaran WITHIN TEMPTATION todavía se encontraban por allí, debieron alucinar pepinillos. En escena demostraron entrega y ganas, pero sigue siendo una incógnita el por qué se marcharon tan pronto