Hay muy buenas comedias francesas por mucho que a muchos les sorprenda, pero no sería el caso de “Pop Redemption”. Ópera prima y correcta de Martin Le Gall que acaba cumpliendo a pies juntillas todos los tópicos de pelis sobre bandas inventadas.

Hay muy buenas comedias francesas por mucho que a muchos les sorprenda, pero no sería el caso de “Pop Redemption”. Ópera prima y correcta de Martin Le Gall que acaba cumpliendo a pies juntillas todos los tópicos de pelis sobre bandas inventadas. Ya sabes de antemano que la road movie con guiños –escasos esta vez- hacia el heavy metal y sus dioses terminará con un concierto por todo lo alto. Esta vez en el Hell Fest francés, del que parece que hagan publicidad.

Los Dead MaKabés son una banda de local de black metal satánico en la que la treintena les da con la realidad de frente. Hijos, trabajo y obligaciones hacen que las dificultades mermen su estabilidad y trayectoria. Es su cantante quien intenta mantener a flote el grupo a base de tiranía y se las ingenia para conseguir un bolo en el Hell Fest francés. A pesar de familias y trabajos tiran hacia delante con una furgoneta destartalada y consiguen hacer un bolo de calentamiento del que van a salir escaldados. Un homicidio involuntario los pone en busca y captura y terminan escondiéndose en el festival de la fresa, haciéndose pasar por un grupo hippy-folk.

Malo cuando hay más guiños a los Beatles que al Black Metal aunque hay momentos brillantes y alguna broma bastante bien conseguida. Obviamente sangre, esqueletos y ataúdes son parte de la parafernalia del grupo que tiene como aliado y líder a un tal Dozzy Cooper, imaginario cabeza de cartel del festival. Actores poco conocidos y un director que hace sus pinitos y se foguea para trabajos más ambiciosos. A destacar la actuación del líder y cantante del grupo (Julien Doré) y la empática y torpe agente de policía (Audrey Fleurot) que ya sabes que les terminará ayudando desde su primera aparición.

Hay muchas películas de este género pero muy pocas como “Cero en conducta” y “Casi famosos”, por no hablar de la obra cumbre del género: “This Is Spinal Tap”. “Pop Redemption” se deja ver y más si eres fan del estilo. Quizá las tres anteriores triunfaron básicamente por un guión que iba más allá de lo esperable y porque parecía que los que escribieron el guión eran rockeros de verdad…