Libros: “Heavy Metal”, Andrew O’Neill
Andrew O’Neill es muy grande. Es un cómico americano de spoken word y ahora escritor, per ante todo es un heavy, creyente y practicante. Me sorprendió que el tipo llegara a salir en televisión (en España) y que se promocionara su libro con alguna entrevista. Sobreactuaba a base de clichés de tal manera que me dio soberana pereza el atacar su libro, pero una vez entras en su humor (absolutamente secundario en esta obra pero inherente en él), el análisis cronológico de lo que es la historia de heavy metal roza lo impecable, si no fuera por su subjetividad.
El libro superventas de heavy metal
Andrew O’Neill ha hecho el libro que nos gustaría hacer a todos los que hemos escrito sobre heavy metal. Contar la historia del género basándote en tus vivencias y tus gustos personales, a la vez que te sumerges en el mar de etiquetas de los estilos. Odia el nu-metal y el sleazy rock angelino, respeta el hard rock, ama por encima de todo el thrash, el death, el black y el sludge, el metal core y nombra de pasada el power metal y el folk metal. También enumera a todas las bandas que odia y se anima a justificar las filias y las fobias una por una.
Odia el Nu Metal y a Mötley Crüe
Cabrearse con Andrew O’Neill porque llama basura a Cinderella, Trivium, Mötley Crüe y demás, es absurdo, ya que parte de una opinión personal. Y sólo un tipo como Andrew O’Neill podía hacer este libro y triunfar, básicamente por el hecho de que es un reconocido cómico, que nunca ha ocultado su amor absoluto por la música que ama. Y si crees que el libro es una recopilación de opiniones basadas en gustos personales, te equivocas. Hay un trabajo enorme en el que el chico avanza desde el Big Bang del heavy metal, desde sus antecesores hasta el día de hoy, pasando por un sendero que suele quedar obviado siempre: la historia de la distorsión y los pioneros de la búsqueda del sonar más duro y fuerte en los 60.
El principal hándicap es el mismo de siempre: saber exactamente cuándo empieza el heavy metal como tal y qué se puede considerar heavy metal y qué no. A pesar de su esfuerzo por definirlo y ubicarlo en el tiempo, vuelve a basarse en los gustos personales, pero se acerca mucho hacia la verdad objetiva. Todo un logro.
El libro es ameno, entretiene y hay mucha información. O’Neill es inglés y el problema de los norteamericanos e ingleses es que su escena apenas es permeable a lo que se cuece en Europa y en otras partes del globo. A pesar de ello O’Neill destaca bandas e indaga en todo el mundo destacando que para él Sepultura es su banda favorita.
¿Vivimos el mejor momento del heavy metal?
El hecho que hace que más conecte con el autor es básicamente que es coetáneo de un servidor y sus vivencias y experiencias son similares a los que vivimos de niños los 80 y los 90 de adolescentes. Finaliza e libro con una reflexión que da para un artículo y no es otra que el heavy metal en la actualidad vuelve a estar en un gran momento. Hay bandas nuevas excepcionales y hemos podido vivir todavía el ocaso de los grandes grupos de los 80 e incluso 70. Los festivales del estilo están en auge, tenemos acceso a toda la música que queramos y la mayoría de bandas pasan de gira por nuestras tierras.
Puedes estar de acuerdo o no con Andrew O’Neill, puede hacerte gracia o no sus chistes, pero “Heavy Metal” es uno de los mejores libros que se han escrito de sobre la música que más amamos y hay un importante trabajo detrás de él. ¡Recomendadísimo!
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