Zeelion: Steel Attack

No todos los dichos se cumplen como norma inamovible, pero se suele decir
que, dentro de lo que cabe, grabar un primer disco es relativamente fácil.
Desde que se inicia un grupo hasta que se consigue un contrato discográfico
existe un tiempo más o menos amplio para componer, cambiar detalles, volverlos
a cambiar, introducir arreglos… La dificultad puede residir en un segundo trabajo,
ya que una vez alcanzado el para muchos casi imposible primer paso, el tiempo
y la presión juegan en contra, y además, con una demora más de la necesaria
puede ocurrir que la buena o mala impresión de la agrupación comience a caer
en el olvido. Pues bien, no ha sido el caso de estos ZEELION, ya que han pasado
siete años desde que debutaran con su disco debut y homónimo, sin duda, se
lo han tomado con calma.

Clasificados como “melodic metal/power metal”, cabe pensar que lo han incluido
en un cajón de sastre sin más para salir del paso de la casi obligada etiqueta
que las compañías tienen que asignar. Las dudas se despejan con las iniciales “I
Burn” y “I Remember”. Metal melódico, speedico, y si se hubiera incluido más
peso en los teclados, estaríamos hablando de unos adoradores de ROYAL HUNT.
De hecho, tengo que confesar, que con la segunda de ellas volví a repasar la
discografía de los daneses por si era una versión que mi mente no llegara a
recordar. Aún así, ambos temas suponen una buena apertura de disco, dos temas
con gancho, con melodías de guitarras muy trabajadas (piques de guitarras-teclados
inclusive), y con un vocalista que no hace aguas al poseer una voz cálida y
de agradable sonoridad. Con el tema título, tornan a un sonido heavy más básico,
sin menos neoclasicismo, y con cierta dureza y crudeza que hace vislumbrar
un disco con grandes recursos. Pero a partir de “Shadows”, el nivel del disco
comienza a bajar de una forma considerable, y es que dejan demostrado que los  medios
tiempos no son su fuerte. Tanto con la citada “Shadows” (con tonalidades menores
dándole ambientación oriental), como con “Stars Of Avalon”, o el cierre con “Wind
Of Time” caen en la tediosidad. Estos suecos no son capaces de sacarle el jugo
necesario a unos temas con estos tempos, comienzan a marear la perdiz una y
otra vez sin llegar a buen puerto, y en resumidas cuentas, hace que “Steel
Atack” pierda enteros e interés auditivo. ¿El resto? Vuelven a repetir fórmula
y a recordarnos que André Andersen tiene una banda que se llama ROYAL HUNT,
a partir de la cual han salido muchos competidores, pero que incluso en sus
horas menores, nadie ha alcanzado sus bondades.

Por cierto, de power metal, más bien poco.