Cuando Gun recibió la invitación para abrir los conciertos de la gira de presentación de ‘Fear Of The Dark’ (Iron Maiden) en España el verano de 1992 no se lo podían creer.

En aquellos tiempos, la banda escocesa había tenido algún éxito a nivel comercial, tuvieron alguna incursión en los 40 Principales con su segundo disco ‘Gallus’ y su estilo no cuadraba demasiado con el resto de compañeros del cartel de este Monsters of Rock: los citados Maiden, Megadeth y Pantera. El guitarrista Guiliano Gizzi lo recordaba en la web de The Metal Circus en el año 2015: “Steve Harris era un enorme fan de Gun. Le encanta la banda. Nos dijo que les acompañásemos en la gira por España y nosotros le dijimos: ‘¿pero cómo vamos a tocar con Iron Maiden y Pantera?’ y me dijo: ‘no me importa, quiero que lo hagáis y giréis con nosotros, debéis hacerlo’”.

Históricamente los teloneros en los conciertos heavies no siempre eran bienvenidos. No hay más que recordar cuando en el año 1984 Joan Jett teloneó a Scorpions en la ciudad condal y tuvo que abandonar el escenario en la segunda canción mientras mostraba una considerable bola de acero que le lanzaron desde la platea. Para muchos, la decisión de situar a Gun entre los adrenalíticos Pantera y los trashers Megadeth fue tomada como una provocación y, los más garrulos, en vez de dirigirse a la barra y dejar pasar el tiempo, se dedicaron a boicotear su actuación.

Para su concierto en la plaza de toros Monumental de Barcelona del día 14 de septiembre de 1992 el ambiente ya estaba caldeado, y a pesar de no existir todavía redes sociales, el boca-oreja había funcionado para putear a Gun. Eran las 18:45h de la tarde y el grupo aguantó el envite con deportividad aunque el peligro era evidente: por primera y única vez en mi vida vi a heavies descalzándose para llenar los calcetines de la arena del coso taurino y lanzarlos con saña hacia el escenario. Los vasos de plástico y los botellines también fueron buenos proyectiles para rellenarlos con todo tipo de sólidos y líquidos dirigidos a los músicos.

“Nos pagaron muy buen dinero por hacerlo, aunque creo que nunca me han humillado tanto sobre un escenario”, declaraba Gizzi entre risas rememorando los incidentes. El grupo aguantó lo que pudo la provocación, pero ante el evidente peligro físico decidieron poner punto y final a su actuación antes de lo previsto. El cantante Mark Rankin se rebotó, se puso la mano en el paquete y decidió enviar al público a tomar por saco con un cariñoso “hijos de puta” y devolviéndoles alguna de las botellas que llegaron a sus pies.

Por si fuera poco este gesto indignó a Dave Mustaine pero por causas muy diferentes: “salió al día siguiente en el periódico La Vanguardia. Dave Mustaine vio el diario, llamó a su discográfica y armó un follón porque nosotros estábamos teniendo más exposición que Megadeth en España (risas). Aquellos incidentes nos fueron muy bien aparentemente”. Con los años, la situación se ha normalizado y el público es mucho más educado: en 2019 Gun actuaron en Barcelona Rock Fest y fueron recibidos con los honores y el respeto que un nombre clásico se merece.

Gun (Foto: Xavi Mercadé)

 

Gun (Foto: Xavi Mercadé)

Megadeth (Foto: Xavi Mercadé)

Megadeth (Foto: Xavi Mercadé)

Iron Maiden (Foto: Xavi Mercadé)

Plaza De Toros Monumental, Barcelona (14 de septiembre de 1992)

Xavi Mercadé